Mantener encendida la llama de la pasión, debería ser la asignación de todos los que tienen una relación de pareja. Pero no siempre se puede. Entonces, llegan estos días de celebrar el amor y muchos intentan reconquistar a la pareja. Una vez pasa el 14 de febrero, todo vuelve a ser como antes. ¿Te identificas?

No está mal una cena romántica o flores para demostrar afecto, pero hay algo más y así lo confirman los expertos: SEXO. 

Y no es tener sexo por tenerlo, es la emoción que te lleva al acto con la persona amada. Según la sexóloga Carmita Laboy, el 95% del acto sexual está en el pensamiento. Las emociones  van tomadas de la mano. Incluso admite que en el sexo todo se vale, siempre y cuando se tenga información de lo que es la sexualidad, el conocimiento de los estímulos y el  respeto. Cuando se cumplen estos propósitos, explica la sexóloga, el sexo se convierte en algo “divino”.  Laboy menciona cinco elementos del acto sexual:  pensamiento,  emoción, conducta, aspecto fisiológico y espiritualidad.

Las emociones juegan un segundo papel dentro del acto de amor. “Es esa ciencia de la que todos estamos rodeados. Es una energía y es la que me ayuda a a ver las cosas de diferente manera. Si uno trabaja su sexualidad es algo de lo que me beneficiaré”, indica Laboy y nombra estas sensaciones como sexo cuántico. En cuanto a la conducta dice que  el sexo debe ser un acto responsable e innovador. “Siempre tiene que ser satisfactorio. Es una necesidad inherente  del ser humano”, afirmó la también escritora y añadió que para llegar  a ese punto  las parejas deben tener en cuenta el aspecto fisiológico. “Para el sexo hay que tener destreza y dominio”, añadió.  

Menciona  que el acto sexual  debería enriquecer a quien lo ofrece y lo recibe. “La culminación del acto sexual, cuando se llega al éxtasis, debe ser un sentimiento de crecimiento interno, cuantitativo y privado”, explica quien publicó su segundo libro dirigido a la sexualidad “De chachondeo y sensualidades: historias cortas tuyas y mías”.  

Insiste, además,  en que las parejas no se deben quedar en lo que conocieron del  sexo en otras etapas de su vida, sino que deben  informarse ya que es la única manera de encontrar un complemento nuevo en la relación.    

Terapia entre dos

Para una vida sexual plena, la doctora menciona  tres puntos a considerar:

- Que ambas personas:   

Escriban una lista de cosas que hacían cuando comenzaron a conocerse como lo es ir a la playa, al cine. Todos esos detalles que cuando lo hacían les provocaba mariposas en el estómago, y ¿por qué no? retomarlas y hacerlas de nuevo.

- Anótalo en el calendario:  

“Aquí el sexo se hace los jueves”. La doctora insiste en la importancia de anotar en el calendario los días para sus encuentros sexuales.  “Es una conducta y una necesidad. Cuando el sexo falta, el ser humano se satisface de otras maneras. Para mí, las veces que una pareja debería tener sexo es dos veces en semana, como mínimo.  Tres veces es lo saludable y todos los días es lo perfecto”, añade con certeza.

- Evaluarse en el acto sexual:  

Decirse entre la pareja qué les gustó, qué no  y qué les gustaría experimentar.