Todos los cambios producen ansiedad, no importa sean deseados o inesperados. La llegada de un nuevo miembro a la familia, conseguir el empleo que tanto hemos anhelado o la ruptura de una relación, la mudanza sin desearlos entre otros. Todos los seres humanos nos preocupamos por como sera lo que vendrá a nuestras vidas. Estamos tan acostumbrados a la cotidianidad que cuando surge algo nuevo en ocasiones no sabemos cómo reaccionar. Creamos hábitos si tener en mente que el mundo, nuestro alrededor es dinámico, cambia constantemente la ansiedad puede ser que nos paralice, destruya o lo mejor, que nos haga productivos.

Cuando las cosas cambian en nuestras vidas negativamente ponemos una muralla y no vemos que podría ser una oportunidad para alcanzar otra cosa. Definitivamente a nadie le gusta perder el empleo, por dar un ejemplo, sin embargo quizás si no te hubiesen despedido no tendrías la fortaleza para irte a buscar algo mejor.

Si no ves los cambios como oportunidades te quedaras en la inercia y el lamento. Por el contrario si fluyes, aceptas y pones tu pensamiento en positivo manejaras mejor las cosas y veras resultados favorables para ti.

Pasos para asimilar los cambios:

-Aceptación- Si no hay marcha atrás porque no movernos hacia el frente. Permítete llorar si es que lo amerita pero tienes que fluir y ACEPTAR para poder continuar.

-Organiza tus pensamientos- toma papel y lápiz, escribe que cosas puedes hacer, que debes mejorar. Muévete con el cambio y hacia el cambio. Ponle fecha a las cosas, no procrastines.

-Flexibilidad- es una de las claves para asimilar los cambios. Si no es como era, ahora será de otra forma. En ocasiones somos tan “cuadriculados” que cuando algo se sale de lo que pensamos debe ser nos irritamos.

-Visualiza una nueva etapa de vida, sea un cambio bueno, neutro o no tan bueno. Mira las oportunidades que puedes estar a tu alrededor. En ocasiones nos quedamos “pegados” en el punto negativo y no vemos las cosas buenas que nos están pasando. Recuerda que la mente es nuestro peor verdugo.

No siempre es verano, no siempre sale el sol pero si dejamos la negatividad a un lado veremos que poniéndole ganas podemos seguir adelante.

“El que dice que puede y el que dice que no puede, por lo general están en lo correcto”- Confucio

Para coordinar una cita la con la Dra. Ingrid C.Marin Espiet, Psicologa Clínica puedes comunicarte al (787)222-4999 o via email: imarinespiet@gmail.com