Johannesburgo. Una adecuada asistencia al parto podría salvar unas 3.5 millones de vidas al año, según asegura un informe de la ONU presentado hoy en la ciudad sudafricana de Durban durante la Confederación Internacional de Comadronas que se celebra cada tres años.

Según el informe, elaborado por el Fondo de Naciones Unidas para la Población (UNFPA), los decesos de madres y niños en 58 países se verían drásticamente reducidos si se mejoraran los paritorios antes de 2015 y si se atendiera al déficit de comadronas, que asciende a 350,000 profesionales.

Cada año, 358,000 mujeres pierden la vida en el embarazo o el parto, unos dos millones de recién nacidos mueren en las primeras 24 horas de vida y hay 2.6 millones de niños que nacen sin vida, debido a que la atención médica es inadecuada o insuficiente, recoge el comunicado de la Confederación Internacional de Comadronas.

El informe revela que, a menos de que se aporte una cantidad adicional de 112,000 parteras, 38 de los 58 países encuestados tal vez no alcancen para 2015 uno de los Objetivos del Milenio de las Naciones Unidas: que el 95 por ciento de los partos sean atendidos por personal cualificado.

Además, si se dispusiera de suficientes centros sanitarios accesibles, apunta el informe, que atendieran sin tardanza las complicaciones, podrían evitarse muchas muertes: el 61 por ciento de todas las defunciones maternas, la mitad de las muertes previas al nacimiento y 60 por ciento de los decesos de recién nacidos.