Mucho se ha machacado y requetemachacado sobre la importancia de llevar a los niños en un asiento protector mientras se viaja en carro. Sin embargo, aunque muchos han captado el mensaje, otros tantos lo llevan a cabo, pero a medias.

Resulta que en un estudio reciente hecho por la Administración Nacional de la Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA, por sus siglas en inglés) en Estados Unidos, se reveló que muchos padres están cometiendo graves errores en la instalación de los asientos protectores, poniendo en peligro la seguridad de los pequeños en caso de sufrir algún accidente en la carretera.

Entre las fallas más graves que se encontraron en este estudio están:

1Las correas usadas para sostener al niño en el asiento estaban colocadas incorrectamente en las ranuras: o estaban demasiado bajas o demasiado altas.

2El clip que une las correas del asiento, y que debe ir en el pecho del pequeño, quedaba en su barriguita. En algunos casos, se encontró que este clip no se usaba.

3El asiento no estaba sujetado correctamente, lo que provocaba que el mismo se moviera más de dos pulgadas hacia adelante y atrás, o de lado a lado. Se supone que el asiento no se mueva más de una pulgada.

4Correas sueltas más de dos pulgadas. Al halar las correas que van en el pecho de la criatura, las mismas cedían cuando lo correcto es que no queden sueltas.

5El cinturón de seguridad del carro, que amarra el asiento protector, estaba colocado de forma incorrecta. Se encontraron casos en el que el mismo descansaba sobre el estómago del bebé y otros en los que el cinturón estaba sobre su cuello o carita.