El celular, un gran aliado para la mayoría de las personas, se ha convertido en una barrera entre madres e hijos a tal manera que está afectando su crianza.

Así lo reflejó un estudio global presentado por la agencia Badillo Saatchi & Saatchi, realizado en 10 países alrededor del mundo, incluido Puerto Rico.

Uno de los detalles más sobresalientes del análisis es que el móvil se transformó en un escape para las madres y lo están utilizando como una niñera para sus hijos.

“Los dispositivos móviles impactan cada vez más las relaciones humanas, y siendo la madre el eje central de la sociedad, cuyo rol tradicional es el de mayor influencia en cuanto la crianza, ella está creando los cimientos en un mundo donde todavía no se han escrito las reglas de cómo se pueden manejar los retos que este dispositivo la hace enfrentar”, expresó Grace Rodríguez, la Master Xplorer de Puerto Rico.

Son muchas las madres que están presentes físicamente, sin embargo, la conexión con el celular es tanta que se traduce en ausencia. De hecho, el móvil y las tabletas compiten con las mamás como medio de sosiego para sus hijos.

Otro dato impactante del estudio es el hecho de que el celular, aunque es un facilitador y ayuda a las progenitoras a organizarse, también las distrae y echan a un lado su responsabilidad maternal.

Las madres participantes están conscientes de que están “adictas” al celular, pero quieren imponerles a sus hijos límites de tiempo en el uso del dispositivo.

El gran reto, según el estudio, es cómo crear un balance, lo que resulta más complicado, ya que los hijos siguen el ejemplo de sus padres.

De igual forma, el dispositivo puede crear o desperdiciar el tiempo. Muchas de ellas trabajan y llegan a sus casas cansadas a seguir trabajando, entonces el móvil o la tableta son utilizados para que los niños se entretengan y les den oportunidad a ellas a hacer sus diligencias.

En la Isla se estima que 2.7 millones de personas tienen teléfonos móviles, y siete de cada diez de estas personas tienen un smartphone.

Según Claudio Chea, director de la división digital de Badillo Saatchi & Saatchi, “el 87% de las personas que tienen un teléfono celular son mujeres, cerca de 2% más que los hombres”.

En el estudio participaron cinco madres boricuas y cada una tenía al menos un hijo menor de cinco años.

Las participantes no fueron sometidas a un método rígido de preguntas, sino que los Master Xplorers compartieron con ellas en escenarios reales, en la vida e intimidad de la muestra, siendo testigos de comportamientos y conductas.