Las brochas son la herramienta ideal para que al aplicarnos el maquillaje quedemos perfectas. Estas suelen combinarse con diferentes colores, productos y ambientes que hacen contacto con la piel, por eso es muy importante que conozcas las razones por las que siempre debes mantenerlas limpiarlas.

Poco funcionales

Cuando tus brochas tienen demasiados residuos de productos y quieres pasarlos por tu piel, el resultado puede no ser muy satisfactorio, pues es posible que te queden grumos o matices de otros colores, además de no permitir que las líneas sean tan rectas como las quieres.

Infecciones virales

Si les aplicas el maquillaje a otras personas con las mismas brochas y, además, te las pasas a tu piel, tienes que mantener una buena higiene con la mismas, ya que el traspaso de bacterias es constante. 

Irritación de piel

La piel de cada uno es muy diferente, así que al no tener la higiene correcta te puede generar irritación en la misma, una alergia que se puede controlar u otra que puede dejar marcas para toda la vida si no la tratas a tiempo. 

Da acné

Cuando te estás maquillando pasas los pinceles por todo tu rostro, si estos tienen suciedad esta puede obstruir tus poros, generando una gran cantidad de brotes y acné.

Bacterias al ataque

Las bacterias siempre buscan dónde alojarse y tus brochas, si no tienes cuidado, no serán la excepción. El uso diario, más los lugares en los que reposas los productos de belleza, entre muchas otras razones, son las suficientes para que siempre tengas en cuenta que debes mantener la higiene de estos artículos fundamentales para aplicarte el maquillaje. 

(Fuente: La Voz)

Para limpiarlas

Mantener tus utensilios de maquillaje libres de bacterias es vital, así evitarás infecciones o alergias que puedan afectar tu rostro. Si no sabes cómo mantenerlas limpias, te decimos algunas formas de hacerlo.  

1. Jabón para la cara 

Una exposición excesiva causa estragos. Produce envejecimiento prematuro, manchas, asperezas e, incluso, cáncer.

2. Aceite de oliva

Toma una esponja limpia y sumerge en un poco de aceite de oliva, pasa por las brochas suavemente, así se limpiarán y además no se secarán por el exceso de residuos de maquillaje. Luego, lava con abundante agua tibia y deja secar completamente.

3. Desmaquillador 

Agrega una taza de agua en un recipiente, luego dos cucharadas de desmaquillador y jabón de lavarte la cara. Sumerge las brochas y deja por tres minutos, sacude las brochas y vuelve a sumergir, espera otro minuto. Seca con una toalla de papel y ¡listo!.

4. Champú para bebé

Toma tus brochas y aplica unas gotas de champú suave, masajea con tus manos y deja secar completamente.

5. Pañuelo húmedo

Toma las brochas y pasa el paño húmedo con un poco de agua, deja secar completamente, la humedad puede dañarlas. Sacúdelas y no uses por un par de horas.