Aunque su piel parece la de alguien de mayor edad, Sara Geurts asegura tener 26 años. La razón: desde los 10 padece del síndrome Ehlers-Danlos, que le impide generar colágeno y por lo cual su piel se vuelve extremadamente frágil y flácida.

De acuerdo con el Sistema Nacional de Salud del Reino Unido, el síndrome que sufre la joven modelo afecta los tejidos conectivos, los cuales actúan como un "pegamento" para brindarles sostenibilidad a la piel.

Dicha "variación" es un desorden "causado por defectos en una proteína llamada colágeno", según el Centro de Información de enfermedades raras y genéticas del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos.

Geurts sufre además de dermatoparaxis. Cuando era pequeña recuerda que se cubría con ropa para no parecer una "niña vieja".

La modelo estadounidense de origen coreano, en una entrevista concedida al canal por internet Barcroft TV, afirmó: “mi piel era mi mayor inseguridad, pero ahora creo que es lo más hermoso".

Dijo además que aunque no le gustaban las arrugas de su piel, ha decidido no tapárselas más, pues tiene como objetivo alterar los estándares de belleza.

Asegura que cuando cumplió 22 años empezó a ver su cuerpo como algo único y dejo de sentir vergüenza por este.

En su cuenta de Instagram, con más de 12,000 seguidores, publica fotos sin tapar sus arrugas en vestido de baño y en ropa interior con mensajes para ayudar a subir la autoestima de las jóvenes de hoy en día.

Geurts es una de las líderes de la campaña en redes sociales "#LoveYourLines" ("Ama tus líneas"), que busca resaltar las imperfecciones de las mujeres.