El dramaturgo de origen puertorriqueño Lin-Manuel Miranda cumplió esta noche la promesa que le hizo de niño a su madre, y la llevó de su brazo a la 89 edición de los Premios Óscar, que se celebraron en el Teatro Dolby en Los Ángeles. 

Ambos optaron por looks clásicos en blanco y negro. 

A principios de febrero, Miranda, nominado por “How Far I’ll Go, tema principal de la cinta de animación Moana, comentó en entrevistas que su progenitora Luz Towns-Miranda la acompañaría a la premiación.

“Tenemos que encontrarle un vestido a mi madre. Cuando tenía 10 años le prometí que algún día me acompañaría a los Óscar. Así que, evidentemente, la prioridad por el momento es asegurarnos de que mi madre esté preciosa. Yo no importo tanto, puedo llevar cualquier traje viejo de pingüino”, señaló entonces al diario USA Today.

El también actor fue una de las estrellas que se unió al llamado de la Unión para las Libertades Civiles en América (ACLU) de lucir un lazo azul en sus atuendos como parte del movimiento Stand With ACLU y en apoyo a sus iniciativas en defensa de derechos civiles más importantes de Estados Unidos. 

Otros que lucieron lazos azules durante la ceremonia lo fueron la modelo Karlie Kloss y el actor Casey Affleck, nominado a mejor actor por Manchester by the Sea. 

En apoyo a una causa distinta, el maestro de las artes marciales Jackie Chan, quien recibió el Óscar de Honor por su trayectoria profesional, desfiló en la alfombra roja con sus dos pandas de peluche, en alusión al animal en peligro de extinción del cual es embajador desde hace varios años. Uno de los muñecos, de hecho, lucía una identificación con el nombre y logo de Unicef, entidad de la que Chan también es portavoz. 

Noche de glamour

La alfombra roja de los Premios de la Academia de las Artes y Ciencias Cinematográficas es el evento más esperado, no solo por los amantes del cine, sino además de la moda. Este año, figuras como Janelle Monae en un modelo Ellie Saab, Kirsten Dunst en un vestido de Dior y Taraji Henson en un diseño de Alberta Ferreti se robaron todas las miradas con elegantes vestidos negros.

Mientras, Emma Stone, nominada como mejor actriz por La La Land, deslumbró con un vestido dorado Givenchy digno del Óscar.

Por el contrario, Leslie Mann llamó la atención, pero por su desatinada elección con un vestido que pareció inspirado en el clásico atuendo de “Belle” en Beauty and the Beast.