NUEVA YORK — El cáncer cerebral es ahora la principal causa de muerte por cáncer infantil en Estados Unidos, por delante de la leucemia, como resultado de los mejores tratamientos contra la leucemia y una frustrante falta de avances en el terreno del cáncer de cerebro.

Los especialistas en estadística del gobierno estadounidense informaron del cambio el viernes luego de hacer una revisión de los certificados de defunción en los últimos 15 años.

"Creo que la mayoría de la gente, cuando piensa en el cáncer infantil, piensa en leucemia", explicó Sally Curtin, de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC por sus siglas en inglés). "Se trata una especie de cambio de guardia".

El cáncer es la cuarta causa de muerte en los niños estadounidenses en general, lo que representa aproximadamente una de cada 10 muertes infantiles en 2014. Alrededor de una cuarta parte de esas muertes por cáncer (534) se debieron al cáncer cerebral. Hubo 445 muertes por leucemia en el mismo año.

Las lesiones accidentales siguen siendo la causa principal de muerte en menores de 19 años, seguidas de suicidio y asesinato, según el informe.

Todavía hay más casos nuevos de leucemia que casos nuevos de cáncer cerebral cada año, pero ya no representan el mayor número de muertes. Eso obedece a los avances en el tratamiento de la leucemia en los últimos decenios y a que la leucemia es más fácil de combatir que el cáncer de cerebro, según los expertos.

"Algunos tipos de leucemia que hace una generación eran casi siempre letales son ahora casi universalmente tratables", dijo Curtin, un especialista que trabajó en el informe.

Sin embargo, la mortalidad por cáncer de cerebro en los niños se ha mantenido más o menos al mismo nivel durante al menos 15 años, según el informe de los CDC.

Tales tendencias son similares para los adultos también, según la American Cancer Society (Sociedad Estadunidense del Cáncer).

La leucemia es un tipo de cáncer que afecta a la sangre. Eso hace que sea más fácil para los médicos combatirla y recurrir a tratamientos como la quimioterapia.

En cambio, el cerebro está protegido por una barrera que ayuda a mantener muchos productos químicos peligrosos —entre ellos muchos fármacos contra el cáncer— alejados del tejido cerebral o de los tumores cerebrales. La cirugía es muy difícil y en ocasiones imposible, dependiendo del lugar donde se encuentre el tumor en el cerebro. El tratamiento mediante radiación puede dañar el desarrollo del cerebro de un niño.