En una época donde desde los embarazos hasta los divorcios y las muertes se anuncian por las redes sociales (ya sea por comodidad, por evitar ver a la gente de frente o por simples motivos de distancia), hay circunstancias en las que es necesario estar de cuerpo presente o, por lo menos, ir más allá de un “lo siento. #smh”

Los seres humanos somos gregarios. Eso significa que, históricamente, nos unimos para contar historias, compartir eventos y enfrentar retos como grupo, dándonos apoyo. Si bien esto es cierto, hay otros momentos en la vida en los que preferimos estar solos (sobre todo en instancias dolorosas) pero siempre será más apreciado sentir que, de todas formas, seguimos conectados.

Si te encuentras con la situación de una separación, la muerte del familiar de un amigo o una pérdida de empleo, por ejemplo, puede ser que prefieras “darle un tiempo” a la persona para ofrecerle tus condolencias o consejo, pero cuando decidas hacerlo es preferible que lo hagas de frente o, en última instancia, con una llamada.

Cada quien maneja sus duelos a su manera y, si no sabes cómo atender la situación y temes equivocarte o revivir malos recuerdos para la persona, puedes seguir estos consejos que ofrece helpguide.org: 

1. Sin rodeos: “Siento la pérdida de tu papá” es una forma de dejar saber que te enteraste y que realmente lamentas el fallecimiento, dándole espacio a tu amigo o familiar a expresarse con un simple “gracias”, o un abrazo, o darle la oportunidad de desahogarse.

2. Escucha sin interrumpir: Si la persona quiere hablar de lo sucedido, escúchalo sin juzgar o entretejer tus propias historias.

3. Bríndale apoyo: Puede ser que el doliente no quiera abundar, pero sí necesite ayuda como ir al supermercado, llevar ropa a la lavandería, cuidar a los nenes en lo que se hacen diligencias o cocinar par de veces en semana. Si así lo sientes y puedes asumirlo, ofrécete a ayudar.

4. No minimices la pérdida: Puede ser un despido, la muerte de una mascota (que para muchos son como hijos), el choque irreparable de un carro o cualquier evento que altere a la persona lo suficiente como para ponerla de duelo. Cada cual siente lo que siente; no eres quién para juzgar.

Lo que NUNCA debes decir:

1. “Sé lo que sientes”: No, no lo sabes. Puede ser que tu también hayas perdido a tu padre, pero cada cual vive su duelo como puede y lo procesa a su tiempo.

2. “Agradece lo que tienes”: Eso no significa nada para quien ha sido despedido o de pronto se encuentra sin medio de transporte. Es el momento de brindar un hombro para llorar y escuchar sin reservas.

3. “Sigue adelante con tu vida”: Divorciarse, por ejemplo, es un evento traumático para muchos –sobre todo si hay hijos de por medio- y pensar que el asunto va a ser “borrón y cuenta nueva” es insultante. Si la persona te pide consejo, oriéntalo hacia psicólogos, psiquiatras o, si son religiosos, sacerdotes o pastores. 

4. “Lo que yo haría es…”: No ofrezcas consejos que no te han pedido. Escucha y sugiere si te preguntan, pero de resto permítele a la persona encontrar su propio camino y ayúdala en el proceso.

A largo plazo…

El dolor de perder un ser amado puede ser tan profundo que nunca sane, por lo que, por más tiempo que pase, debes respetar el proceso. Si tu hermano perdió a su esposa no es cuestión de estar buscándole citas al año para que “lo supere”; no te entrometas. Mejor…

1. Ayuda a largo plazo: Luego del “shock” inicial y el corre-corre de un funeral, por ejemplo, cuando las aguas bajan tu apoyo sigue siendo necesario. Si puedes, visita a la persona y acompáñala, aunque sea a ver televisión un rato. Déjale sentir que no está sola.

2. No asumas que está bien: Hay gente que se envuelve en una coraza o incluso se molesta si le hablan del tema, jurando que “todo está perfecto”. Muy bien, no presiones, pero déjale saber que estás disponible.

3. Pendiente a las fechas clave: cumpleaños, aniversarios, Día de las Madres, Navidad… todas estas fechas guardan significados importantes. Una tarjeta, una llamada o una visita harán maravillas para levantarle el ánimo, siempre y cuando la persona así lo manifieste.