Son bien chulitos y a la mayoría de los niños y niñas les encanta verlos, tocarlos y hasta alimentarlos. La experiencia con el contacto animal es, sin duda, enriquecedora. Pero, si no tiene cuidado, podría llevarse a su casa varios gérmenes y alguna que otra enfermedad por estar en contacto con animales.

Los animales pueden transmitir bacterias, virus, parásitos y hongos.

Ya sea en ferias agrícolas o en un zoológico, es importante tener siempre presente los cuidados higiénicos.

El Centro para el Control de Enfermedades (CDC) recordó que cuando las personas se olvidan de lavarse las manos después de tocar un animal se ponen en riesgo de enfermarse, por lo que recomendó, entre otras medidas, no ingerir alimentos en el área donde se exhiben animales y no llevarse comida a la boca sin antes lavarse.

Si en el área no hay lavamanos y jabón disponible, el CDC recomienda entonces el uso de un sanitizer, aunque no debe sustituir el lavado con agua y jabón.

Si está con menores de cinco años, nunca los deje sin supervisión ni permita que interactúen con animales si tienen en la mano algún juguete con el que volverán a la casa . Suena drástico, pero tampoco es recomendable acercar el coche, botellas de bebé o incluso el bobo a las zonas donde están los animales.

Las personas con el sistema inmunológico comprometido, no importa la edad, tampoco deben estar cerca de animales.