A días de conmemorarse el primer aniversario del paso del huracán María por la Isla, son muchas las personas que podrían entrar en períodos de crisis y retroceder en los avances que han tenido en su recuperación emocional. 

Así lo explicó la directora de la Administración de Servicios de Salud Mental y Contra la Adicción (Assmca), Suzanne Roig,  al mencionar que la literatura establece que un aniversario “se convierte en un elemento que puede ser un catalítico, que puede echar para atrás lo que hemos avanzado”. 

Es por esto que no descartó un aumento en las situaciones de salud mental y a su vez un incremento en los intentos suicidas. Sin embargo, aseguró que la agencia  está preparada para atender la situación y recomendó que “si usted siente que los niveles de ansiedad se han elevado, que lo que le viene a la memoria es todo lo negativo que vivió en ese momento, busque ayuda”.

Hoy, cuando precisamente se observa el Día Mundial para la Prevención del Suicidio, Roig repasó las estadísticas de suicido, que vieron un significativo aumento en el 2017.

“La realidad es que si vemos los últimos 10 años, Puerto Rico ha mantenido la misma tasa de suicidios en 8.2 (por cada 100,000 habitantes).  Pero no podemos negar que el año 2017 (253) hubo números mayores al del 2016 (198). En los meses posteriores al evento (María) -comparado con el mismo período del año anterior- hubo un 20% aproximado de incremento en suicidios”, sostuvo la funcionaria, quien agregó que desde principios de 2017 “estimábamos una proyección de que  iba a concluir con un incremento. El 2017 fue intenso, de muchos cambios; una recesión económica, incertidumbre y encima tuvimos los huracanes Irma y María que transformaron muchos estilos de vida de   familias y personas”.

La trabajadora social explicó que “sobre todo en esta fase de aniversario (el asuntos del suicidio) lo vamos a atender con distintas estrategias alrededor de todo Puerto Rico. Aunque hemos estado desde septiembre (pasado) con diversas campañas.  A personas que en un momento se identificaron porque las desesperanzas que provocaron las pérdidas y las circunstancias de vida provocaron que quizás pensaran en el suicidio, nunca las hemos dejado solas”.

Roig informó  que este año “las estadísticas hasta julio indican que hay 137 suicidios.   Estamos en un menos cuatro,  si se compara ese mismo período al 2017. Eso es positivo pero como siempre digo, queda un largo camino por recorrer, así que no hemos descansado ni vamos a descansar, porque un suicidio para nosotros es demasiado”.

En cuanto a la población de mayor riesgo, Roig dijo que es el hombre adulto, entre los 45 y 59 años.  “Por eso es que estamos lanzando distintas iniciativas dirigidas a impactar a las figuras masculinas, desde niño hasta adulto”, dijo.

Entre las iniciativas que Assmca trabaja bajo su Programa de Intervención en Crisis, que impacta directamente a las comunidades, está el Proyecto Anímate, que se intensificó en noviembre pasado y donde equipos de facilitadores de Salud Mental siguen visitando los 78 municipios. 

“Ahora estamos trabajando en una segunda fase de fortalecimiento emocional, dando pequeñas intervenciones psicoeducativas a la familia, trabajando en el desarrollo de la resiliencia”, explicó la funcionaria. 

Esto incluye a especialistas que promueven la iniciativa Storytelling, donde los participantes hacen una  historia con sus experiencias para “poder evaluar donde estábamos en aquel momento y donde estamos ahora; porque hemos visto que a pesar de que la recuperación es visible, la persona no se siente que está bien y a veces hay que trabajar un poco para que esta persona pueda ver que ciertamente no está en la misma posición que se encontraba en octubre… ni siquiera en enero (pasado)”. 

De otro lado, Roig anticipó que para fin de año tendrá un grupo certificado en Assmca  en la práctica conocida como Applied Suicide Intervention Skills Training (ASIST), que aplicarán estrategias para prevenir, orientar y educar sobre el suicidio.

“La meta es  tener  trainers que a su vez certificarán (gratuitamente) a líderes comunitarios,  religiosos, organizaciones sin fines de lucro, maestros de la escuelas, policías, bomberos paramédicos”, concluyó Roig.

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