Nochebuena, Navidad y fin de año son fechas en las que la prioridad es celebrar con los seres queridos. Pero esa alegría puede verse interrumpida por accidentes u otros eventos que nos cambian ese escenario festivo por el de la sala de emergencias. 

Y es que,  en ocasiones, los preparativos y las fiestas  de la época desembocan en accidentes o condiciones provocadas por el exceso.

Israel Ayala, director médico de la Administración de Servicios Médicos de Puerto Rico (ASEM), mencionó las razones más frecuentes por las que las personas acuden a las salas de emergencias durante estos días.

 La ingesta excesiva de alimentos y/o bebidas es una de las razones principales por las que muchos  terminan esperando atención en una fría sala de hospital en vez de seguir celebrando con los suyos. 

 “Las emergencias que más frecuentemente se presentan en los departamentos de emergencias de los hospitales en Puerto Rico están relacionadas, número uno, a las ingestas de alcohol en los pacientes que tienen enfermedades  hepáticas previas, entonces presentan complicaciones relacionadas a eso. Además, la ingesta de alimentos calóricos afecta a pacientes como los diabéticos, porque les altera el metabolismo. Los hipertensos se ven afectados porque la dieta nuestra  de Navidad, culturalmente, es alta en sal y si no tienen cuidado se descompensan”, afirmó el galeno.

Los traumas son otras de las causas más comunes de incidentes en esta temporada. En ocasiones, juguetes nuevos que les causan golpes a los niños. Otros incidentes más frecuentes, según destacó Ayala, son las caídas, fracturas, laceraciones en los ojos y golpes en las extremidades.  

“Las personas están en su casa y  hay que hacer algo en la casa, hay que poner algo de Navidad. Entonces, se están dando el coquito, el palo, y de momento se ponen a manejar herramientas peligrosas como una sierra y se llevan una mano. Pero  no solo tiene que estar relacionado al alcohol, quizás no son muy diestros utilizando esa maquinaria eléctrica y también se pueden hacer daño. Lo cierto es que hasta treparse en el techo para poner unas luces puede terminar en un accidente. Nosotros vemos todos los días durante las Navidades que la persona se cayó del techo de la casa porque estaba poniendo unas luces para que la casa se viera bonita”, destacó el doctor.

Los accidentes de tránsito también son  frecuentes en estos días y tienen como mayor factor de riesgo el consumo de alcohol.

La pirotecnia, de igual manera, está entre las primeras causas de accidentes de esta temporada. Las quemaduras y laceraciones son las consecuencias más comunes de su uso.

Hay accidentes que  pueden evitarse, por lo que  Ayala indica que la clave es la moderación y la prevención.

“La moderación te va a llevar a la prevención. Tú no previenes y después moderas, es al revés. Es la única forma”, enfatizó el doctor.

Los primeros auxilios son esenciales para estos casos, pues el paciente los requerirá según sea la situación. Algunas  pueden resolverse en la casa, pero otras requerirán acudir a la sala de emergencia más cercana. 

“Lo más simple y lo más adecuado es que tiene que buscar ayuda médica, dependiendo el trauma. Hay traumas leves, moderados y  severos, así que dependiendo el tipo de trauma hay que buscar ayuda”, recomendó el doctor. 

Ojo con los pequeños

Compartimos varios consejos para mantener a tus pequeños libres de accidentes en estos días:  

-Verifica que los regalos sean acordes a su edad. Menores de tres años no deben interactuar con juguetes que desprendan partes de un tamaño menor al de un cilindro del papel sanitario. Esto incluye, por ejemplo, tener precaución con peluches y muñecos que tengan botones que puedan arrancarse.

-Enseña a los niños mayores a tener precaución al compartir sus juguetes con los menores de tres años, ya que pueden facilitarles algunos que pongan en riesgo su seguridad.

-En cuanto a los juegos electrónicos, jamás debes permitir que el menor utilice el receptáculo. Enséñale que solo papá y mamá o un adulto puede conectar los cargadores y demás equipo a esta conexión eléctrica.

-Recuerda que usen casco protector, rodilleras e indumentaria dirigida a este propósito si van a correr bicicleta o patineta.

-Cuidado con juguetes que puedan causar pérdida de audición. Por ejemplo, hay cornetas o sirenas que pueden provocar un nivel de sonido de 90 a 120 decibeles, lo que puede generar pérdida auditiva. Incluso, es importante supervisar que otro menor no toque juguetes cerca del oído del niño.

-La pirotecnia debe ser utilizada solo por adultos y en áreas exteriores. Para los padres que las faciliten a sus hijos, la manipulación de este material debe ser totalmente bajo la supervisión de un adulto.