Un bebito de días de nacido y contagiado del virus del chikungunya a través de su madre al momento del parto,  falleció a principios de octubre, convirtiéndose en la primera víctima pediátrica fatal en la Isla de esta peligrosa enfermedad.

La información fue confirmada a Primera Hora por la epidemióloga del Estado, Brenda Rivera, quien explicó que el caso  se trata de una embarazada que estaba en su último trimestre de gestación y acudió al hospital con síntomas de fiebre y taquicardia fetal. 

"El feto estaba en estrés y se decide admitirla bajo observación por sus síntomas… en menos de 24 horas de admisión mamá da a luz. Mamá y bebé parecían saludables y se les dio de alta. Pero al día siguiente, tienen que regresar porque el bebé tenía fiebre, letargo y taquicardia por lo que fue rehospitalizado", expresó la Rivera, al indicar que al  transcurso de tres días la condición del neonato empeoró y falleció.

Posteriormente, se tomaron muestras del bebé que dieron positivo al virus del chikungunya. Sin embargo, hay que esperar por informes de autopsia para determinar con certeza si la criatura -quien nació prematuro- murió del virus o si padecía alguna otra condición. Con la muerte del recién nacido suman cinco las defunciones ocurridas en el País con pacientes que tenían el virus. Las otras víctimas fatales fueron adultos, aclaró la epidemióloga.

A raíz de este lamentable caso, las recomendaciones de los expertos en el Departamento de Salud es que no se puede bajar la guardia con el chikungunya, particularmente los grupos en riesgo que incluyen niños, envejecientes, personas con enfermedades crónicas y las embarazadas.

En el caso de las mujeres en gestación, dijo, el problema se agrava porque si adquieren el virus en el último trimestre pueden generar una infección aguda y el bebé pudiera infectarse al momento del alumbramiento y tener complicaciones tan severas como la muerte.

Agregó que usualmente un neonato contagiado presenta síntomas como fiebre, llanto desconsolado, se muestra letárgico y no quiere comer. "Algunos puedes presentar lesiones en la piel como ampollas que terminan infectándose y provocando cambios en pigmentación. Pero también pueden tener otras manifestaciones  neurológicas que podrían provocar cambios en sus destrezas motoras y tener, incluso, daños permanentes", advirtió.

Por eso es importante que las embarazadas continúen utilizando el repelente como el mejor aliado para prevenir contagios de este virus. "No deben tener miedo a utilizarlos. Al contrario, la literatura científica dice que es importante para prevenir la enfermedad", dijo al destacar que la frecuencia a utilizar el producto, dependerá del porciento de DEET que tenga el químico. "En el caso de los que tienen DEET de 30% la aplicación es cada ocho horas. Si tiene 7%, debe aplicarlo cada dos horas", dijo a modo de ejemplo.

Al momento, el último informe publicado por el Departamento de Salud arrojó que se han confirmado en Puerto Rico unos 3,287 casos de personas contagiadas con el virus de chikungunya. El Informe de la Semana 42, que comprende del 15 al 21 de octubre, destaca que hasta esa fecha se habían reportado unos 16,786 casos sospechosos.

A preguntas de Primera Hora, Rivera indicó que de la estadística de casos confirmados por laboratorio, entre el 18%  y el 20% corresponden pacientes pediátricos, cuyas edades fluctúan entre 0 meses de nacido hasta los 19 años. En el caso de recién nacidos la data es cerca de un 4% del total de casos, dijo.