Cuando vas a un restaurante a comer con tus  hijos , ¿qué opciones de platos hay en el menú para tus pequeños que sean saludables, económicas y de una porción adecuada?

Probablemente, ninguna. 

Las que sí podemos mencionar de memoria son aquellas opciones con las que cuenta prácticamente todo “menú de niños”: nuggets con papas fritas, pizza, macarrones con queso y  hamburguesas. 

La organización Family Cook Production lanzó recientemente la campaña Kids Food Reboot con el fin de los que los lugares de comida amplíen sus menús para niños. O sea, que no se limiten a alimentos congelados sino que le ofrezcan a los niños alimentos frescos y nutritivos, dándole la oportunidad de experimentar nuevos platillos y modificar su paladar por uno más saludable.  

“Los niños comerán otros alimentos, lo harán. Todo depende de la forma en que se les presente”, dijo Lynn Fredericks, fundadora de la mencionada organización. 

Para Fredericks la forma en que se les presente los alimentos a los niños será un factor determinante. La clave, es que parezcan divertidos. Para ello, dijo, habrá que cambiar la porción y quizás ajustar uno que otro ingrediente para hacerlo menos picante o menos amargo, por ejemplo. 

“Comer hamburguesa o macarrones con queso no es malo. El problema, en sí, no es la comida sino que perpetúan la separación sobre lo que los niños comen”,  mencionó. 

Los restaurantes en Estados Unidos comenzaron a agregar menús para niños para la década de los 70 movidos por un interés en recuperar los ingresos que habían dejado atrayendo a un nuevo sector. Uno de los primeros restaurantes en tener un menú para niños fue el del Waldorf Astoria Hotel, pero sus platos eran nutritivos. Sin embargo, para la década del 70 cuando la comida procesada se apoderó del mercado, los menús de los más chicos fueron sustituidos. 

¿Cree que los restaurantes deben tener otros platos para los niños a precios más asequibles?