El peligro de fumar es mayor para los adolescentes. Resulta que en Puerto Rico, mientras la cantidad de adictos al cigarillo ha bajado, la de menores probándolo va en aumento, principalmente porque los establecimientos donde los venden no le piden identificación válida y luego porque los chicos y las chicas ceden a la presión de grupo.

De acuerdo con el administrador auxiliar de prevención de la Administración de Servicios de Salud Mental y Contra la Adicción (Assmca), Juan Rivera, lo más preocupante es lo fuerte que puede llegar a ser la adicción a este producto tóxico cuando se empieza a fumar en la adolescencia, con las consecuencias hasta letales que provoca.

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¿Qué dicen los números? Rivera informa que estudios anuales hechos por el Departamento de Salud revelaron que mientras en el 2015 el 13% de los adultos fumaba, en 2016 la cantidad bajó al 10%. En cambio, según ha mostrado la encuesta Consulta Juvenil que realiza Assmca cada tres años, el uso entre los menores subió de 9.1% entre los años 2007 y 2009 a 14% entre los años 2010 a 2012. La encuestra más reciente aun no ha publicado, pero temen que la tendencia al alza se repita debido a la falta de controles. 

“Más de la mitad de ese 14% nos dice que tiene fácil accesibilidad (a cigarillos) en sus vecindarios, porque no les exigen ID. Y está cerca de 52% la cantidad que señala que la presión de grupo negativa es lo que los hace iniciar la práctica”, revela el funcionario.

Fumar no es asunto que deba tomarse a la ligera, particularmente por sus efectos dañinos en todas las esferas de la vida. A continuación algunas de las razones principales por las cuales no se debe fumar.

1. Fumar mata

Según la Organización Mundial de la Salud, fumar mata cada año a casi seis millones de personas y de estas, más de 600,000 no son fumadores, pero están expuestas al humo de segunda mano. 

“Estamos hablando de algo pequeñísimo que tiene mas 4,000 ingredientes tóxicos y de esos está comprobado que 43 provocan cáncer. Por eso en la cajetilla hay un cintillo que dice advertencia del Cirujano General”, recuerda Rivera.

Si la posibilidad de morir o causar la muerte de seres amados no fuera suficiente razón para dejar de fumar, hay más.

2. Si no mata, enferma

Científicamente se ha comprobado que fumar causa cáncer y otras enfermedades crónicas y hasta mortales, incluso si no se fuma, pero se inhala humo de segunda mano o se mastica tabaco.

El Centro Nacional de Cáncer de Estados Unidos afirma que “el tabaco es la causa principal de cáncer y de muerte por cáncer”. 

“La gente que usa productos de tabaco o que está regularmente alrededor de humo de tabaco en el ambiente (también llamado humo de segunda mano) tiene un mayor riesgo de cáncer porque los productos de tabaco y el humo de segunda mano tienen muchos compuestos químicos que dañan el ADN”, advierete en su página electrónica.

Agrega que “el uso de tabaco causa muchos tipos de cáncer, incluso cáncer de pulmón, de laringe, de boca, esófago, garganta, vejiga, riñón, hígado, estómago, páncreas, colon y recto, cérvix o cuello uterino, así como leucemia mieloide aguda”. Y como si fuera poco, “las personas que usan tabaco sin humo (rapé o tabaco de mascar) tienen riesgos mayores de cánceres de boca, de esófago y de páncreas.

3. Huele mal

El humo de segunda mano no es lo único que trasciende al punto de afectar a víctimas inocentes. Existe lo que se llama “humo de tercera mano” y es la contaminación que el humo de cigarillo deja luego de este apagarse. El doctor Jonathan Winickoff, del Harvard Cancer Center en Boston encabezó un estudio en el que se ilustró cómo el cóctel de toxinas que salen del cigarillo a través del humo se impregnan en telas, alfombras, muebles y otros materiales por horas o hasta días amenazando la salud de todos, particularmente de infantes y niños. 

¿Quién no ha percibido ese olor particular en el pelo, el aliento, la ropa, la habitación o el auto de personas fumadoras? Es difícil no detectarlo, pero aun cuando no se detecte, ahí está.

4. Te quita resistencia

Los Centros para el Control y la Prevención de enfermedades de Estados Unidos (CDC) afirman que “fumar debilita las defensas del cuerpo contra efermedades (el sistema inunológico)”.

Además, debido a que las sustancias tóxicas viajan a través de la sangre por todo el cuerpo, cada órgano y sistema está expuesto a los daños que estas causan reduciendo su capacidad de trabajar. Si los pulmones, que procesan todo el humo inhalado, pierden capacidad, menos oxígeno llega a la sangre y se inicia el deterioro en cadena. 

5. Daña la dentadura

Una baja en el sistema inmunológico deja desprotejidas las encías y las hace más propensas a enfermedades. Los CDC indican que fumar duplica el riesgo de enfermedades de las encías, reduce la eficacia de tratamientos para sanarlas, aumenta el riesgo de sensitividad en los dientes y el peligro de perder piezas. 

6. Daña tu piel

Con el tiempo, se va haciendo evidente cómo la piel de personas que fuman se deteriora y hasta envejece aceleradamente. Incluso, se vuelve más vulnerable a enfermedades como infecciones y cáncer de piel. Estudios científicos han encontrado que la piel puede llegar a lucir hasta 30 años más vieja por fumar, daños que según los resultados de estos análisis no se pueden revertir. Eso sí, parar de fumar puede evitar daños mayores.

7. Te hace dependiente

Rivera advierte que, aunque la adicción a la nicotina es peligrosa a cualquier edad, en el caso de los adolescentes “como están en pleno desarrollo y la nicotina es estimulante del sistema nervioso central, crea una adicción sumamente fuerte, en el caso de los que empiezan de adolescentes es bien difícil dejarlo y de adultos muchos en gran medida necesitan ayuda médica para poderlo dejar”.

8. Amenaza la salud de tu familia futura

Cambios en el ADN como los que se mencionaron antes implican que los efectos negativos de fumar, así como de los efectos del humo de segunda y tercera mano, amenazan y podrían afectar a futuras generaciones, es decir, sus hijos, nietos y demás descencientes.

9. Te hace gastar

El costo de una cajetilla de 20 cigarrillos en Estados Unidos fluctúa entre $5.06 (en Missouri) y $10.56 (en Nueva York) según tarifas de 2014. Dependiendo el nivel de consumo de cada persona, saque usted la cuenta. A nivel nacional eso redundó en gastos de más de $170,000 millones en costos de cuidado médico y más de $156,000 millones en pérdida de productividad, incluso por exposición de segunda mano. 

10. Superar la adicción te hará más saludable y fuerte

Rivera y el doctor Víctor Toraño, médico psiquiatra y asesor de Assmca, afirmaron que ante lo difícil que resulta superar la adicción al tabaco y la nicotina, quien logre superarla “será un excelente ejemplo” para los demás, sobre todo para su familia. Toraño recalcó que “no importa el tiempo que lleve la peronsa fumando, siempre hay un beneficio al dejar de fumar, y hay tratamientos disponibles para ayudar a las personas, incluso si han intentado dejarlo anteriormente. Siempre hay un beneficio en términos de oxigenación, en la circulación de venas y arterias pequeñas, en la cicatrización, para que los pulmones puedan oxigenar mejor”, recalca. 

Exhortó a los médicos a preguntar a sus pacientes si fuman y proveerle recomendaciones directar cuando así sea.

Recordaron que el Departamento de Salud cuenta con el servicio de la Línea de Cesación de Fumar “Déjalo Ya”. El número telefónico a llamar para ayuda es el 1-877-DEJALOS (1-877-335-2567).