Hace tiempo se sabe que trabajar sentado durante las ocho horas de la jornada laboral no es bueno para la salud. También es conocido que la mayoría de la gente que trabaja, así es que lo hace. Si a estar en una silla todo el día se le suma la tecnología que propicia un estilo de vida sedentario, entonces mantener la salud es todavía más difícil.

Una investigación de la Escuela de Medicina de la Universidad de Missouri encontró que, aunque la función vascular se afecta cuando una persona está sentada por seis horas corridas, caminar durante diez minutos puede contrarrestar ese daño.

“Es fácil que nos consuma el trabajo y perder la noción del tiempo sometiéndonos a períodos prolongados de inactividad”, indicó Jaume Padilla, profesor de nutrición y fisiología del ejercicio, según reseñado en el portal Science Daily. “Nuestro estudio encontró que cuando te sientas por seis horas o la mayoría del tiempo de una jornada laboral de ocho horas, el flujo de sangre de las piernas es muy reducido, pero también encontró que con caminar diez minutos se revierten las consecuencias”.

Para el estudio, los investigadores compararon la función vascular de 11 hombres jóvenes sanos antes y después de un tiempo prolongado de estar sentados. Los resultados indicaron que el flujo de sangre de la arteria poplítea (una vena en la pierna) se redujo dramáticamente después de seis horas. A los participantes entonces se les pidió que dieran una caminata a su propio ritmo y a los diez minutos se había restaurado la función vascular y había mejorado el flujo de sangre.

Muchos de los ambientes de trabajo son sedentarios y los investigadores indicaron que es importante que la gente entienda los efectos que tiene en la salud vascular estar sentados tanto tiempo. Interrumpir la jornada laboral para dar una caminata neutraliza el daño.

Padilla, autor principal del estudio, señaló que ahora falta más investigación para determinar si esos periodos repetidos de función vascular limitada tienen complicaciones a largo plazo.