Con tan solo 23 años, la francesa Victoire Maçon Dauxerre era una de las top model con mayor demanda del mercado de la moda. Sin embargo no todo era glamour, según cuenta la ex modelo en su cuenta de Facebook.

"La anorexia bajo las lentejuelas", dice uno de los pie de foto en el Facebook de la ex modelo que se animó a escribir un libro sobre su experiencia, titulado “Jamás se es demasiado delgada. Diario de una top-model”.

Al mismo tiempo que promociona su libro en Facebook y otras redes sociales, Victoire emprende una campaña para advertir a otras personas que buscan convertirse en modelos, que las exigencias del mundo de la moda pueden llegar a ser destructivas.

A los 18 años empezó su pesadilla, ya que los cánones de la belleza la obligaban a tener estrictas dietas, que muchas veces consistían en alimentarse con tan solo tres manzanas diarias, engañar al estómago con agua gasificada y solo una vez por semana comía proteína animal. La modelo que revela algunos de los pasajes de su vida en Facebook, mide 1,78 y alguna vez llegó a pesar solo 47 kilos, por estas dietas.

"Nadie me dijo que debía perder peso, pero me dijeron: ‘En septiembre harás las Fashion Weeks, la talla es 32-34 y debes caber‘. Es en ese momento cuando tendría que haberme ido", dijo la ex modelo en la presentación de su libro, el cual promociona por Facebook.

Fue una de las 20 top model más requeridas del mundo, pero a un precio muy alto: su salud. Algunas de las selectas fotos que comparte Victoire en su Facebook vienen acompañadas de mensajes  que hablan sobre los retoques que le hacían a sus fotos para añadirle volumen, ya que tenía las mejillas hundidas y los brazos muy delgados.