Fumar en presencia de tus mascotas puede ser más perjudical de lo que podrías imaginar. No solo afecta a quien tiene el hábito, sino también a los animalitos.

El panorama se complica cuando fumas en un sitio cerrado, en el que también están tus perros o gatos. Es así porque los objetos que rodean a un fumador quedan infiltrados con el llamado “humo de tercera mano”.  En fin, fumar en presencia de tus mascotas es nocivo para ellas.

Al ser consultada sobre el tema, la doctora veterinaria Frances Piñero afirmó que las mascotas que viven en casa de fumadores pueden confrontar serios problemas de salud. Los gatos están más expuestos.

“Aunque no fumes frente a ellos, el olor fuerte a nicotina queda impregnado, por ejemplo, en los muebles, y puede afectarlos, especialmente a los gatitos, que suelen de padecer de asma fuerte”, indicó Piñero. 

La doctora, según mencionó, ha conocido más casos de gatos afectados por el hábito de fumar de sus dueños, que casos de perros.

“Los gatos ingieren más humo que los perros debido a su alto nivel de autohigiene. Absorben más toxinas del ambiente. He visto varios gatos que padecen de asma y problemas cardiopulmonares por el uso del cigarrillo de sus guardianes”, comentó la doctora veterinaria.

 Piñero explicó que los niveles de nicotina en la piel de animales domésticos (con dueños fumadores), podrían causarles riesgo de daño celular, hacerlos aumentar de peso y hasta desarrollarles algunos tipos de cáncer.

“Incluso, tanto a perros como a gatos les puede dar cáncer en los pulmones. Es un problema serio”, señaló.

Además de cáncer en los pulmones, las mascotas expuestas al humo de la nicotina pueden desarrollar asma y problemas respiratorios. 

“También cáncer en la piel”, agregó la doctora. “Como todo ese humo puede estar en el ambiente donde los animalitos están, puede afectarles la piel. Por culpa de la nicotina los perros y los gatos pueden presentar también reacciones alérgicas e infecciones”, detalló la veterinaria con práctica en Trujillo Alto. 

¿Qué se puede hacer?

“La recomendación número uno es que la persona deje de fumar, y punto; porque a veces hasta la misma ropa (que tiene puesta la persona)  absorbe la nicotina y si haces contacto físico con la mascota con esa ropa, lo estás exponiendo a un peligro. Como mínimo, lo menos que puede hacer el dueño fumador, es lavarse las manos antes de tocar a su mascota”, enfatizó la entrevistada. 

La marihuana también es peligrosa para ellas. 

Piñero agregó que también se han dado casos de mascotas que se han intoxicado cuando han ingerido productos que contienen marihuana. 

“También pueden convulsar. Hay que tomar precauciones para que la mascota no tenga contacto con productos que contengan marihuana”, dijo.