En cada diccionario de sinónimos en español, la primera  palabra que debería aparecer como análoga de “enigma” debería ser “gato”.
Y es que, perdonando el juego de palabras, no es para nadie un misterio el que los gatos son, precisamente eso, un misterio, una incógnita que nos ha fascinado por milenios. Tanto así que desde los tiempos del antiguo Egipto, eran venerados como deidades. Más aún, innumerables culturas los consideraban ánimas superiores cuya misión era guiar  las almas de los humanos en su viaje del plano terrenal al divino.
De hecho, todo esto  parece más que justificado cuando tomamos en consideración que los felinos domesticados constituyen las mascotas más populares en el mundo y nos han acompañado por los últimos 10,000 años, más o menos.
  Sin embargo, no empece a tamaña adoración, ¡es tanto lo que ignoramos acerca de los gatos! Es más, éste es uno de los animales que más sufren y padecen innecesariamente debido a que, para sus cuidados y mantenimiento,  los humanos nos dejamos llevar más por las leyendas y los rumores que por la información real y científica.
   Por todo ello, decidimos consultar con el doctor Hugo E. Córdova, médico veterinario graduado de la Ohio State University, y quien cuenta con 20 años de práctica privada. Por si fuera poco, su vasta experiencia  con animales domésticos incluye un gran número de gatos.

Encanto incuestionable
Para Córdova -quien, en promedio, atiende a un 65% perros y un 35% gatos-,  los felinos representan algo muy especial.  Sobre estos últimos dijo: “Tuve muchas gratas experiencias durante mis tiempos como estudiante. Me encanta su naturaleza misteriosa e independiente y su sorprendente inteligencia. A través de los años, he sido muy afortunado de tenerlos como mascotas excelentes”.
¡Y no nos cabe ni la más mínima duda de que las personas que concurren con el médico se cuentan en los cientos de miles! Por todo ello, el especialista tiene un interés muy especial en ayudarnos a desmitificar todas las ideas erróneas preconcebidas acerca de los gatos.

Hay una gran diferencia
Lo primero que hay que aclarar es que los gatos pueden actuar de manera indiferente, pero eso no quiere decir que sean insensibles o que no necesiten cuidados y mucho amor. “Como he mencionado”, advirtió Córdova, “su naturaleza independiente puede proyectar una idea errónea de que los cuidados necesarios (para los felinos) no sean tan obvios como en los perros. Pero, nada más lejos de la realidad, y que (éstos) necesitan las mismas atenciones que cualquier otra mascota. Son animales extremadamente sociables, que se benefician inmensamente de la interacción con las personas y otros animales”.
Más aún, abundó el veterinario: “El gato necesita interacción continua con sus amos. Problemas de salud tan importantes como infecciones de oídos, problemas oculares, enfermedades dentales, lesiones de la piel (incluyendo tumores), condiciones respiratorias que causen secreciones nasales, la dificultad para moverse (artritis), anormalidades en patrones urinarios y de evacuación, todos pueden ser fácilmente identificados por dueños que observen e interactúen frecuentemente con sus gatos”.

Dan su trabajito, pero vale la pena
Nadie niega que, para muchos gatos, salir de la casa o que los  metan en un kennel para llevarlos al veterinario puede ser poco menos que una odisea, lo que, de por sí, dificulta cualquier diagnóstico. Y esto es algo que el veterinario reconoce abiertamente.
 “El poder hacer un buen examen físico en un gato requiere de mucha paciencia... y experiencia”, señaló Córdova. “Son animales que se afectan fácilmente por cambios en su rutina, lo que puede causar un comportamiento errático”. Y añadió: “Muchos gatos pueden actuar de una manera agresiva, estando en un ambiente diferente -como el de una clínica veterinaria-, lo que puede afectar la facilidad de hacer un diagnóstico adecuado y llevar a cabo los tratamientos pertinentes”.

La alimentación y la salud
Mantener a un gato saludable no se puede limitar a llevarlo al veterinario una vez al año para su chequeo anual y sus vacunas. Para una vida larga y sana, una alimentación apropiada es vital.
Sobre esto, advierte el especialista: “A pesar de que los gatos, por naturaleza, son animales carnívoros, ellos requieren de una nutrición balanceada, que sólo puede obtenerse a través de dietas comerciales diseñadas par cubrir todas sus necesidades dietéticas. Es importante mencionar que los requerimientos nutricionales varían de acuerdo con la etapa de vida, nivel de actividad y condiciones de salud”.

 

 

 

 
Más información
Hugo E. Córdova, DVM, tiene su práctica en la calle María Moczó #61, en Ocean Park, Santurce. Para citas o preguntas, pueden llamar al 787-728-2726