Peces globo, bureles, morenas, sábalos y balajú han aparecido muertos en cantidades extraordinarias a orillas de la laguna Grande en la Reserva Natural Cabezas de San Juan, en Fajado, informó este martes el Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA).

Para atender esta situación de emergencia, así como la acumulación excesiva de sargazo en la referida laguna bioluminiscente, personal del DRNA, de la Junta de Calidad Ambiental (JCA) y de la entidad Para la Naturaleza, adscrita al Fideicomiso de Conservación, ha sido movilizado al lugar.

La secretaria del DRNA, Carmen Guerrero Pérez, precisó en declaraciones escritas que los peces y camarones muertos se encuentran en el área conocida como el Paso de los Pescadores, una servidumbre que da acceso desde la playa Seven Seas, mientras el sargazo se ha acumulado en el canal acuático que da acceso a la laguna.

Personal especializado del Área de Emergencias investiga las posibles fuentes de contaminación que pudieran estar vinculadas a la mortandad de peces, informó el presidente de la JCA, Weldin Ortiz Franco.

“En un informe preliminar no se encontró nada visible que determine que exista algún químico o sustancia como aceite o combustible, que ocasionara la muerte de los peces. Tampoco se halló descargas ilegales que fueran provenientes de algún negocio privado o tubería de aguas usadas que estuvieran descargando en el cuerpo de agua. No obstante, personal del Programa de Calidad de Agua de la agencia estará realizando un muestreo para verificar los siguientes parámetros físico como pH, oxígeno disuelto, temperatura y conductividad”, detalló Ortiz Franco en un comunicado de prensa.

En cuanto al sargazo, la secretaria del DRNA señaló que “hemos encontrado una mezcla de yerbas marinas siringodium con algas de sargazo y otras algas de mar”. Guerrero Pérez explicó que la remoción se hace manualmente con un rastrillo, pues no se puede llevar equipo pesado al lugar. 

“Estamos trabajando de forma intensa para resolver esta situación como la emergencia que es, no solo por la importancia ecológica, sino por el gran motor turístico y económico que representa para Fajardo y Puerto Rico”, expresó la funcionaria.

Por su parte, el presidente de Para la Naturaleza, Fernando Lloveras San Miguel, indicó que fue esa entidad la que detectó la situación e informó a las agencias gubernamentales.

“Continuamos colaborando con dichas agencias, monitoreando las aguas de la laguna Grande en la Reserva Natural Cabezas de San Juan y notificaremos cualquier cambio a las autoridades pertinentes”, sostuvo Lloveras San Miguel.