BERLIN — La sonda espacial Rosetta recibió su última orden desde la Agencia Espacial Europea (ESA): estrellarse en la superficie helada del cometa que lleva más de una década persiguiendo.

Rosetta activó sus propulsores durante 208 segundos el jueves por la noche, dijeron científicos, que esperan que alcance la superficie del cometa 67P/Churyumov-Gerasimenko a las 1038 GMT del viernes.

Durante su último descenso, la sonda ejecutará una serie de comandos preprogramados que incluyen tomar imágenes nunca vistas antes a baja altura que podrían revelar características de su superficie con un tamaño de hasta 2,5 centímetros (una pulgada).

Tanto Rosetta como la nave de exploración Philae, que aterrizó en otro cometa en noviembre de 2014, proporcionaron nuevos datos sobre la composición de los cometas y la formación de los cuerpos celestes, explicó la ESA.