No es casualidad que los éxitos taquilleros en el teatro del año pasado: "Men and the City" y “Y la yola pa’dónde va” al igual que “La Casi Casi Primera Dama” sean comedias. 

Nuestro pueblo quiere reírse y necesita hacerlo.

Resulta terapéutico pues la risa lo cura todo, renueva nuestro ánimo y nos llena de fuerzas para enfrentar los retos de la vida.

Me alegra saber que a través de mi Stan Up estoy poniendo mi granito de arena llevando alegría y risas a la gente, consciente de que en momentos difíciles la risa sirve como aliciente a nuestra gente. 

Orlando Urdaneta, experimentado actor venezolano y quien es parte del elenco de la “Casi Casi Primera Dama”, impresionado por la reacción del público durante las cinco funciones de este fin de semana me dijo: “todos los países deberían tener un show como este al finalizar sus elecciones. Nunca había visto una catarsis tan natural y espontánea, es mágico”.

Expresó Orlando, quien siendo venezolano, aprecia de manera muy especial el ver a gente de todos los partidos políticos reunidos en una sala de teatro riéndose a carcajadas de ellos mismos. 

El tema que hace unas semanas nos dividía, la política, de pronto se convierte en musa para la risa y fraternidad.

Aunque en estas primeras funciones pudiéramos pensar que la audiencia, en su gran mayoría es afiliada al PPD, también hubo muchas personas de los otros partidos.

En la medida que han pasado las funciones la audiencia se ha ido tornando cada vez más mixta y representativa del País.

Admito que yo también estoy sorprendida por la forma en que el público ha reaccionado.

Además de los muchos boletos que se han vendido en un periodo tan corto de tiempo, lo que agradezco muchísimo, es gratificante ver a toda la audiencia riendo sin parar desde que empieza hasta que termina el show.

“Es increíble” dice Orlando. “Hasta cuándo se hacen las llamadas antes de comenzar la gente se ríe”.

Tiene razón Orlando, han sido mágicas estas primeras funciones pues las risas no paran y la atmósfera es de lo mejor sirviéndonos de estímulo al elenco, que hicimos una doble función el domingo, a las 6:00pm y 9:00pm sin que se notara ni una pizca de cansancio sobre el escenario. 

La observación que Orlando hace como artista experimentado y extranjero es muy interesante.

Esa capacidad que tiene nuestro pueblo para unirse, es una de nuestra grandes fortaleza.

Si la risa nos une, tenemos que seguir haciendo comedia y llevarla a cada rincón de Puerto Rico.