Querido pai Clooney:

Para empezar esta misiva, debería poderte explicar este asuntaje de llamarte pai, cosa que me imagino que te romperá la chola por falta de entendimiento como tantas otras cosas que te he amontonado en tu feisbuk, tu tuiter y tu  imeil.

Pero es tarde ya, como dijo doña Sylvia Rexach, para comprender esto que yo he sentido por ti, o mejor digamos por tu fantasma porque frankli entre nosotros no ha habido eso que le mientan tiempo real, sino una cadena de suspiros de mi parte en contemplación de las fotos que ripitedli me han puesto en mi pared de Féisbuk quienes se enteraron la epilepsia de ensote que sentía por ti.

Que bien me dice la trabajadora social que resulta ser amores puyus, y que pa eso, además de echar una santa llorada un par de noches, dándole cantazos a la almohada, manda un homeopático que venden los doctores naturales que tiene un nombre que le hace honor al diagnóstico:  tormento de amor no correspondido.

Menos mal que no conoces el repertorio de canciones corta venas que es uso y costumbre en mi tierra cuando un hombre te huye con actitud y empiezas a sospechar que es Manilo o más bien, como le dicen ahora, después del ricent Blac Fraidei, un Funai.

Ahora no vengas a fingir un dolor barato por esta dejada cibernética, igual que en un escenario.

No finjas tu dolor barato porque  en todo caso a quien toca cantar la Lupe a tó jender pá despojarme de este amor que nunca fue es a mi.

Ultimadamente, tu drama no es necesario. Ya conozco ese teatro.

Admito que ad inisium nosotros necesitamos un tutor para evitar poscones por distanciamientos culturales.

Si conocieras más sobre mi país, te puidera hacer metáforas que te lo explicaran mejor.

Te podría decir que debiste haber sido un Tuller enviado por Diosito a enmendar las ventanas rotas de mi vida.

Pero no.

Te convertiste casi casi en un Jorge de Castro Font, que de vez en cuando aparecías a dar un mensaje como si bajara de los mismísimos cielos y luego te desaparecías.

Disculpa si no entiendes estas alusiones criollas.

Mejor te hablo de quiebras emocioales, de pelambrera amorosa, de fracaso al pensar que tu amor estaba apalancado en mi corazón. Porque segurito entiendes ese vocabulario que has leído en las novelas sobre mi patria que se han escrito en el Economist y en el Guashington Post.

Yo confiaba ciegamente en la fiebre de tus besos, aunque toítos fueran producto de mi imaginación.

Pero el telón cayó por eso, porque mentiste serenamente apareciendo deili en mi féisbúk y haciéndome tanto cerebrito que antes de tomar café por la mañana y de poner las noticias en la radio, me esgalillaba preguntándole a Diosito en canción mode: Cuando llegará, el día de mi suerte.

Y tu fingiendo con esa cara bella que pavoneas por todo el Internet y las redes. Qué bien te queda el papel. Después de todo parece que esa es tu forma de ser.

Ya me lo dijo Minga, que ese pecado de confiar ciegamente en la fiebre de tus besos  me iba a llevar por la calle de la amargura. Porque mentiste serenamente y el telón cayó por eso.

Así pues, fíjate que te dejo libre, pa que sigas por ahí con tu falsedad bien ensayada, y tu estudiado simulacro.

 Y como despedida no creas que te voy a hacer duelo como a don Mandela. Que vá. Voy a escribirle a don Bernier para que proclame tu propia efeméride en Borinquen como destrozador de corazones, que muchas como yo que hay moliendo vidrio por estar enamorás a lo divino de ti sin que na ni na. Y no se te ocurra entrar en mi wall en pose de esmelenamiento. 

Me vas a perdonar que no te crea. Porque lo tuyo es puro teatro.

 Es bueno que sepas que cuando la sangre hispana se revuelca en las venas de una mujer, no hay Adonis que pueda seguir haciéndola dar vueltas y vueltas  sin que medie esperanza de paradero. Solo doña Jilari hizo lo propio, seguro que porque nunca tuvo oportunidad de tener un jart tu jart chat con doña Sila. Y ahora me voy por ahí cantando Aguanilé.

Que seguro tampoco tienes un clú de lo que es. Por eso trata de nacer de nuevo en estas tierras caribeñas, igual de bello pero mas alegrestaito a ver si Diosito quiere y en la próxima vida,  vienes un chin echáo palante.

Tu ex mai, Jacinta.

PD: No olvides de poner un ratito a La Lupe. Bien te haría adoptar el ejercicio cada vez que dejas una mujer por ahí por esos mundos de Dios. Adiosito. Y por si me vas a responder pensando que según tu punto de vista yo soy la mala, te pido ahora mismo que te reprendas. Ahora que si insistes en hacer reivindicamiento, manda que te aprendas de memoria Si Vuelves Tú de La Lupe…Si vuelves tú, me tienes que querer, me tienes que adorar….Quedas advertido ,   Y no te deseo mal. Solo que nunca puedas borrarte ni con laser lo que salió de mi corazón hacia ti aunque fuera a lo divino. Y el ringtone que mandé a hacer especialmente pá ti que decía: Tírate que está llanito. Que seguro que tampoco lo entendiste. Well….guarever. Como dicen por ahí: Año Nuevo, Marchante Nuevo.