El 26 de abril pasado, Davis Allen Cripe, un joven estadounidense de 16 años, estaba en la escuela cuando de pronto colapsó en plena clase. Alrededor de una hora después, el adolescente de Carolina del Sur fue declarado muerto. 

Ante el abrupto fallecimiento, el cuerpo del joven fue sometido a estudios y ayer el forense el condado de Richland, Gary Watts, dio a conocer los resultados: Davis murió producto de un ataque cardíaco gatillado por un elevado consumo de cafeína. 

Según reveló la investigación, el día de su muerte el adolescente ingirió tres bebidas cargadas de cafeína en un período de dos horas: un café latte, una gaseosa y una bebida energética. Los especialistas creen que la combinación de las tres hizo que Davis presentara una arritmia que luego derivó en el ataque cardíaco.

La causa de muerte del adolescente fue dada a conocer ayer en una conferencia de prensa, donde estuvo presente el padre de Davis, quien llamó a los adultos a poner atención a lo que beben sus hijos, de acuerdo a CNN.

"Como todos los padres, nosotros nos preocupamos de nuestros hijos a medida que crecen. Nos preocupamos de su seguridad, de su salud, especialmente cuando empiezan a manejar. Pero no fue un accidente de automóvil el que le quitó la vida. En cambio, fue una bebida energética", declaró Sean Cripe sobre su hijo Davis. 

Conforme a la autopsia realizada al cuerpo del adolescente, este era sano y no presentaba ningún problema cardíaco que hubiera empeorado por el consumo de cafeína. Asimismo, los análisis demostraron que en el organismo de Davis no había rastros de drogas ni alcohol. 

"Esto no fue una sobredosis. Perdimos a Davis debido a una sustancia totalmente legal", sostuvo Watts, quien agregó que es absolutamente necesario advertir a las personas, sobre todo a los niños, que las bebidas energéticas pueden ser peligrosas.

"Padres, por favor hablen con sus hijos respecto a los peligros de las bebidas energéticas", instó, por su parte, el padre de Davis. 

La Academia Americana de Pediatría recomienda que los adolescentes (12 a 18 años) no deben consumir más de 100 mg de cafeína por día, un consejo importante si se considera que solo una lata de bebida energética de 250 ml tiene en promedio unos 80 mg de cafeína.