ORLANDO, Florida — Un hombre de 73 años que estuvo perdido siete días fue encontrado milagrosamente ileso esta semana en Orlando, luego de alejarse más de 48 kilómetros (30 millas) de su hogar.

Efraín Meléndez Pacheco desapareció el 13 de marzo tras llegar de Puerto Rico, donde había estado en el funeral de su hermano. Familiares dicen que salió a pasear a su perro y nunca regresó.

Un día después, un oficial de servicios a animales detuvo al hombre porque el perro cojeaba mucho. El agente le quitó el can e indicó en un reporte que Meléndez Pacheco dijo que estaba tratando de llegar a la casa de su hermana pero no sabía dónde vivía o cuánto tiempo se había alejado. Sin embargo, el oficial no lo detuvo.

Autoridades policiales del Condado Orange están investigando por qué el agente no ayudó al individuo. Señalaron que éste no habla español y que Meléndez Pacheco no habla inglés.

La mayor Nancy Brown indicó que datos incorrectos evitaron que el teniente identificara a Meléndez Pacheco como un adulto extraviado y en peligro.

Un policía retirado detectó al hombre perdido el jueves por la mañana a unos 56 kilómetros (35 millas) de donde se le había visto por última vez. Tenía la camisa ensangrentada, había perdido 4,5 kilos (10 libras) de peso y estaba desorientado, pero el periódico Orlando Sentinel reportó que por lo demás está en buen estado físico. Pocas horas después de volver a casa, ya estaba en el jardín recogiendo fruta.

"Una oración es buena. Cien oraciones son mejores", dijo su cuñado Carlos Rivera. "Todas las oraciones llegaron juntas y sucedió el milagro".

Sus familiares se preocuparon sobre el destino de un hombre mayor en temperaturas superiores a los 27 grados Celsius (80 Fahrenheit). Meléndez Pacheco dijo a la policía que no recordaba dónde había dormido ni muchos detalles más de su travesía, pero señaló que le dolían los pies y que había comido algo de pollo y patatas fritas. Había gastado únicamente 40 dólares de los 300 que llevaba en el bolsillo.

Rivera y su esposa, Margarita, señalaron que ahora Meléndez Pacheco vivirá con ellos en vez de volver a Puerto Rico, donde los vecinos señalan que tiene problemas de memoria y se extravía cada vez con mayor frecuencia.

La pareja se dijo decepcionada de que el primer oficial no hubiera detenido a Meléndez Pacheco días antes.

"Debió haberlo ayudado en ese momento", comentó Rivera. "Espero que lo que le sucedió no le pase a otras personas".