El alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, anunció hoy una extensión del racionamiento de gasolina en la ciudad tras el paso del huracán "Sandy", ya que, según dijo, casi un tercio de las estaciones de servicio aún permanecen cerradas.

El racionamiento de gasolina se impuso el pasado 9 de noviembre y ha ayudado a reducir las colas de espera en las gasolineras, apuntó el alcalde, pero en vista de las vacaciones de Acción de Gracias, que comienzan el próximo jueves, subirá la demanda.

En consecuencia, Bloomberg ha extendido el racionamiento hasta el próximo viernes, para no correr el riesgo de volver a las interminables filas en las gasolineras.

Para ello se ha implementado que los vehículos con matrículas que terminen en número impar acudan a por suministro los días impares, y las placas terminadas en par, lo hagan los pares.

"El sistema de licencias de las matrículas par-impar ha funcionado bien y ha ayudado a reducir los tiempos de espera y las filas en las gasolineras", dijo Bloomberg en un comunicado, y añadió que quería "asegurarse de no correr el riesgo de volver a las filas extremas que vimos antes de que el sistema se implementase".

Una medida similar se impuso en el vecino estado de Nueva Jersey así como en Long Island, pero en ambos casos ya ha sido suspendida.

A pesar de que la medida se acogió con quejas en la Gran Manzana, donde no faltó quien vio en esta situación analogías con los racionamientos de las dos crisis del petróleo de la década de los setenta, muchos conductores mostraron su conformidad al comprobar que los embotellamientos estaban disminuyendo.

El racionamiento de gasolina se anunció el 8 de noviembre, por Bloomberg y el gobernador del estado de Nueva York, Andrew Cuomo, después de que la lenta mejora del suministro de gasolina tras los problemas causados por el huracán "Sandy" se frustrara con la avería de un oleoducto que abastece de combustible a la región.