Bonnie, que se convirtió este jueves de nuevo en depresión tropical, se transformó hoy en una tormenta tropical mientras avanza hacia el este del Atlántico, frente a la costa de Carolina del Norte, informó el Centro Nacional de Huracanes (CNH).

Bonnie presenta vientos máximos sostenidos de 40 millas por hora y se encuentra a 285 millas al este del cabo de Hatteras, en Carolina del Norte, indicó el CNH en su último boletín.

Los remanentes de Bonnie, la segunda tormenta tropical de la temporada de huracanes en el Atlántico, se fortalecieron el jueves en la costa de Carolina del Norte cuando se transformó de nuevo en depresión tropical y esta tarde adquirieron aún mayor fuerza.

No obstante, los meteorólogos del CNH esperan que Bonnie comience a debilitarse en las próximas horas y en su avance hacia el este del Atlántico, a una velocidad de traslación de 13 millas por hora, "se convierta en un sistema postropical para el sábado".

Bonnie es el segundo sistema que se formó antes de que comenzara este miércoles oficialmente la temporada de huracanes en la cuenca atlántica, que concluye el próximo 30 de noviembre.

A mediados de enero pasado, se formó el huracán Alex, que llegó a categoría 2 en la escala de intensidad de Saffir-Simpson, de un máximo de 5, y se degradó rápidamente a tormenta tropical tras tocar tierra en el archipiélago de las Azores.

La temporada de huracanes en la cuenca atlántica puede ser "cercana a lo normal", con 10 a 16 tormentas tropicales, informó recientemente la Administración Nacional de Océanos y Atmósfera (NOAA).

La agencia federal presentó sus previsiones de cara a la temporada de ciclones en la cuenca atlántica para este año, que afecta durante seis meses a Estados Unidos, el Caribe y México.

La NOAA señaló que entre cuatro y ocho de las tormentas tropicales pueden llegar a ser huracanes, un pronóstico superior al de los últimos tres años.

Entre uno y cuatro de los huracanes previstos serán de categoría mayor, según este organismo.