El escritor y periodista estadounidense, Robert Bridge aseguró en un artículo de opinión para  el portal noticioso RT, que sería posible ver que Hillary Clinton pudiera "intentar apoderarse de la Casa Blanca por la puerta trasera", dado a que el proceso democrático en Estados Unidos se convirtió en "un escandaloso espectáculo televisado para entretener a la élite cada cuatro años, mientras que mantiene a la gente creyendo que puede efectuar un cambio real".

Bridge agregó que aunque parezca absurdo, le pueden negar a Donald Trump la presidencia debido a "un sistema democrático que ha sido corrompido hasta el fondo por la excesiva riqueza, el poder y la connivencia en los niveles más altos" de la sociedad.

El periodista asegura que, actualmente se está llevando a cabo "un golpe silencioso" en nombre de Hillary Clinton y la "supuesta victoria" de Hillary en la votación popular podría presentar peligro para el presidente electo, Donald Trump.

En su artículo expuso también que se trata de "una guerra diseñada para ejercer una presión indebida sobre el Colegio Electoral". Y aunque esa institución "nunca le ha robado las elecciones a un candidato que ha obtenido la mayoría de los votos", hay una posibilidad de que los llamados "electores infieles" se inclinen a favor de Clinton.

Puede "rebelarse" El Colegio Electoral

El próximo 19 de diciembre, los miembros del Colegio Electoral de Estados Unidos se reúnen  para elegir a su nuevo presiente, sin embargo, según Bridge, "en otras circunstancias sería una simple formalidad".

Insistió  en que "esta es una batalla que los demócratas no pueden perder", ya que esta campaña de 2016 representa "una lucha de poder épica que determinará la trayectoria de la política interior y exterior de Estados Unidos" como en ningún otro momento histórico en años recientes.

Plantea también que si 37 electores republicanos "se rebelan", "rompen la ley y votan contra Trump", esto le impedirá al magnate republicano convertirse en presidente.

Aseguró que el equipo de abogados y consultores políticos del Partido Demócrata están trabajando para que esto suceda, porque, según él, para ellos "no es cuestión de apoyar a Clinton, sino de detener a Trump".

Por otro lado Bridge desmintió de que, Jill Stein, la candidata presidencial del Partido Verde, fue quien pidió a un recuento de votos en los estados de Wisconsin, Michigan y Pensilvania.

Según el escritor se trata de "un gran esfuerzo" por parte de los demócratas "para robarle la Casa Blanca a Donald Trump".

Señaló que si el asunto no se resuelve hasta el 19 de diciembre, los votos de estos tres estados, que suman 46, podrían ser considerados por el Colegio Electoral como "perdidos" y esto significaría que el presidente electo, Donald Trump, se quedaría solo con 260 votos, 10 por debajo de los necesarios para que un candidato pueda ser considerado automáticamente ganador de los comicios.