El ejército ha comenzado a destruir el mayor arsenal restante de armas químicas en Estados Unidos en una planta automatizada del sur de Colorado.

Las autoridades del Depósito Químico de Pueblo señalaron que pusieron la planta en operación el miércoles.

Bajo un acuerdo internacional, la planta destruirá unos 780,000 cartuchos de artillería rellenos de agente mostaza. El ejército había informado previamente que tenía planeado comenzar con el operativo esta semana.

El agente mostaza puede provocar mutilaciones o la muerte al dañar la piel, los ojos y las vías respiratorias.

La planta utiliza agua y bacterias para neutralizar el agente mostaza. Se espera que las labores finalicen a mediados de 2020.

En el depósito ya se habían destruido previamente 560 cartuchos y botellas de agente mostaza debido a fugas y otros problemas que las hacían inapropiadas para la planta.

Los objetos destruidos se colocaron en una cámara sellada, donde se abrieron con explosivos y se neutralizaron con otras sustancias químicas.