Texas.- Cuatro personas murieron y 14 más resultaron heridas el miércoles en un tiroteo en la base militar de Fort Hood en Texas, una de las mayores de Estados Unidos y que en 2009 ya vivió una masacre similar con 13 muertos y una treintena de heridos.

El pistolero fue identificado como Ivan López, de 34 años, y fuentes del diario El Nuevo Día confirmaron que se trata de un soldado puertorriqueño, natural de Guayanilla, que sirvió en la Guardia Nacional de Puerto Rico.

El teniente general de la base texana Mark Milley informó que Lopez, quien acabó por disparase a sí mismo al encontrase ante agentes de la policía militar, estuvo en Irak en el 2011 y fue diagnosticado con trastorno por estrés postraumático. 

Desde hace varios meses estaba siendo tratado por depresión y ansiedad.

Todas las víctimas eran militares y, a primera hora de hoy, todos los heridos hospitalizados tenían un diagnóstico grave. Tres de ellos se encuentran en estado crítico, informaron los médicos del centro Scott & White.

No había indicios de que el ataque estuviera relacionado con terrorismo, dijo Milley.

El presidente Barack Obama prometió que los investigadores llegarán al fondo del incidente, y trató de tranquilizar a la nación, cuya sensación de seguridad fue nuevamente sacudida por un acto de violencia en masa.

Obama dijo que él y su equipo seguían los desarrollos muy de cerca, y que los detalles de lo ocurrido en la base continuaban llegando de manera fluida. Dijo que el tiroteo evocó dolorosos recuerdos de 2009, cuando 13 personas fueron asesinadas en la misma base, en el que ha sido el ataque más letal contra una instalación militar nacional en la historia.

Obama reflexionó sobre los sacrificios que los soldados de Fort Hood han hecho, entre ellos varios viajes a Irak y Afganistán.

"Prestan servicio con valor, con distinción, y cuando están en su base de operaciones deben sentirse seguros", dijo Obama. "No sabemos aún qué ocurrió hoy, aunque obviamente la sensación de seguridad se ha roto de nuevo".

El presidente habló sin apuntes ni declaraciones preparadas en la misma sala de un restaurante de Chicago donde se reunió con unos 25 donantes para un acto de recaudación de fondos destinados al Comité Nacional Demócrata. Funcionarios de la Casa Blanca acomodaron las mesas en las orillas de la sala a fin de abrir espacio para que Obama hablara a la nación.

El ataque de noviembre de 2009 en Fort Hood ocurrió al interior de un recinto atestado donde los soldados esperaban para ser vacunados y hacer papeleo de rutina después de regresar de Afganistán e Irak o mientras preparaban su partida.

El psiquiatra castrense Nodal Hasan fue sentenciado a la pena capital por ese ataque.