El dueño de una posada en las Montañas de Pocono en Pensilvania descubrió el cuerpo descompuesto de una huésped, y la policía estatal informó el lunes que la mujer de 80 años había estado muerta por semanas o quizás meses. 

Elementos de la policía estatal fueron enviados a la posada Harvest en Honesdale el viernes luego de que el dueño percibiera un olor desagradable mezclado con aromatizante y la hija de la huésped Patricia Richey le prohibiera entrar al cuarto de la mujer. 

De acuerdo con la orden de registro, la hija de Richey, Moira, de 51 años, le pidió al dueño de la posada otro cuarto para ella desde hace meses, argumentando que su madre tenía demasiado caliente la habitación compartida. 

La policía informó que los dueños rara vez subían al tercer piso, donde se hospedaban las mujeres, porque tanto madre como hija no debían pagar renta ya que tenían una relación familiar, y que el resto de los huéspedes se quedaban en el segundo piso. 

Programaron una autopsia para determinar la causa de la muerte.