WASHINGTON.-  Reguladores federales estadounidenses aprobaron el miércoles una regla que se retrasó durante largo tiempo que obliga a las compañías a revelar la brecha salarial entre sus directores ejecutivos y sus empleados.

La Comisión de Bolsas y Valores de Estados Unidos (SEC por sus siglas en inglés) votó en favor de ordenar que la mayoría de las compañías públicas revelen la tasa diferencial entre la compensación anual de sus principales directivos y la paga media de sus empleados.

La votación de 3-2, con el voto en contra de los dos comisionados republicanos, culminó años de un debate público acalorado sobre una de las reglas más polémicas presentadas por la SEC en años recientes. La SEC recibió más de 280,000 comentarios sobre el asunto desde que hizo la propuesta hace dos años y el cabildeo por grupos empresariales en contra del requerimiento fue intenso.

La SEC actuó bajo un mandato emanado de una ley del 2010 que reformó las regulaciones financieras tras la crisis. Se responsabilizó a jugosos paquetes salariales para ejecutivos, a menudo vinculados con los precios de las acciones, de alentar desastrosas tomas de riesgo y ganancias a corto plazo a expensas del rendimiento a largo plazo.

Es improbable que el reporte público de la brecha salarian resulte en una reducción de los paquetes de paga a ejecutivos ni un aumento de los salarios de empleados.

Pero los números podrían tener un impacto simbólico y forzar a los directivos de las empresas a controlar los excesos, dicen partidarios de la transparencia. La información podría además ser útil para accionistas a la hora de emitir votos de recomendación sobre salarios de los ejecutivos.

La regla requerirá a las compañías a reportar la tasa diferencial en sus informes financieros anuales para el primer año fiscal después del 1 de enero del 2017.

Teniendo en cuenta las objeciones de grupos empresariales, la SEC incluyó cierta flexibilidad y excepciones en el requerimiento.

Por ejemplo, las compañías pueden usar estimados o muestreos para determinar el salario medio de sus empleados.

Compañías públicas más pequeñas, aquellas con menos de 75 millones de dólares en acciones en manos externas o ingresos menores de 50 millones, están exentas de las revelaciones. Las compañías además pueden excluir de sus estimados de salario medio a hasta 5% de sus empleados en el extranjero.

Daniel Gallagher, uno de los dos republicanos que votaron contra la regla, dijo que la misma es "abiertamente política" e insinuó que pudiera villar la Constitución.

Del otro lado, Sarah Anderson, analista del liberal Institute for Policy Studies, elogió la decisión, diciendo que se trata de "una enorme victoria para el estadounidense común".

Lee más historias.