OLATHE, Kansas.  Un jurado inició hoy deliberaciones para decidir si condenan a la pena de muerte a un supremacista blanco que confesó haber matado a tres personas porque quería matar a judíos.

Los jurados declararon culpable a Frazier Glenn Miller Jr. , de 74 años,  la semana pasada de los tres asesinatos de abril pasado, pero hoy comienzan a decidir si el castigo apropiado es la pena de muerte.

Miller decidió representarse por derecho propio y concluyó su argumentación final diciéndole al jurado: “francamente mis queridos, me importa un comino” ("Frankly my dears, I don't give a damn, frase popularizada por la película “Lo que el Viento se Llevó").

Luego levantó la mano derecha e hizo el saludo nazi.

"Las acciones del acusado son claramente el tipo de caso para el que está hecho la pena de muerte”, dijo el fiscal Attorney Steve Howe.

Miller fue condenado por asesinar a William Corporon, de 69 años, a su nieto Reat Griffin Underwood, de 14, en el centro de la comunidad judía en Overland Park, y luego mató Terri LaManno, de 53, en el cercano centro de retiro Village Shalom.

Ninguno era judío.

Miller es un veterano de la Guerra de Vietnam War que fundó en su nativo Carolina del Norte el grupo Caballeros de Carolina del  Ku Klux Klan y luego el Partido Patriota Blanco. Aspiró al senado de estados Unidos en 2006 y 2010 con una plataforma a favor de la supremacía blanca.

Kansas lleva décadas sin ejecutar a alguien mediante pena capital.