Tocar la barriga de una mujer embarazada es muy natural para las personas que celebran que una mujer esté en estado de gestación. Sin embargo, el estado de Pensilvania acaba de renovar una advertencia sobre la práctica ilegal de tocar la barriga de una futura madre sin su consentimiento.

Este acto, incómodo para algunas embarazadas, se observa bajo la ley de acoso del estado. Según el portal nydailynews.com, el origen de esta decisión obedece al incidente reciente de un hombre en Pensilvania acusado de tocar y sobar repetidas veces el vientre de una futura mamá.

"En esencia, alguien ha tocado el vientre de una mujer embarazada alguna vez", dijo el abogado Phil DiLucente a una estación televisiva. "Es muy común que las mujeres embarazadas tienen que pasar por eso. El único problema es cuando acosa, molesta, alarma en el acto de tocar, entonces se trata de una violación, un cargo de acoso", reportó.