Un jurado determinó que una pareja del condado Orange deberá pagar 5.7 millones de dólares por haber plantado droga en el automóvil de una ex presidenta de Asociación de Padres y Maestros en un intento fallido para que fuera arrestada.

El jurado concedió el viernes la compensación a Kelli Peters. El panel del Tribunal Superior deliberó menos de una hora antes de determinar que Kent Easter, de Irvine, y su ex esposa Jill Easter actuaron con malicia, vejación o fraude, reportó el periódico Orange County Register.

Kent Easter se declaró en bancarrota antes del juicio civil, pero tal protección no se extiende a la reparación por daños y perjuicios, dijo Rob Marcereau, abogado de Peters.

Las autoridades señalaron que los Easter tenían una querella con Peters, que comenzó con un comentario que hizo ella respecto al hijo de siete años de la pareja, cuando plantaron en 2011 analgésicos cuya compra requiere receta médica, marihuana y un pipa para marihuana en el auto de Peters. Luego llamaron por teléfono a la policía, la cual la detuvo brevemente en la Escuela Plaza Vista en Irvine, donde ella realizaba trabajo voluntario.

Peters testificó en el juicio de la demanda civil que se sintió humillada cuando un policía revisó su vehículo ante la mirada de su hija.

"Yo estaba llorando y suplicándole que no pusiera las drogas sobre el automóvil, porque la gente lo vería", dijo Peters. "Todos me estaban viendo".

La mujer fue interrogada durante aproximadamente dos horas.

Kent Easter, representándose durante el caso, argumentó que Peters exageraba su aflicción para obtener una compensación financiera.

"El hecho de que se haya hecho algo realmente malo a una persona no le proporciona un premio de la lotería ", dijo el hombre al jurado.

Kent Easter no quiso hacer comentarios después del veredicto y Jill Easter, quien también se representó en el juicio, no estuvo presente en la corte al leerse el fallo, señaló el Register.

Peters dijo que los Easter nunca mostraron remordimiento por sus acciones.