Varios empleados de McDonald's despedidos que dicen haber sido sujetos a discriminación racial y hostigamiento sexual demandaron a la matriz corporativa de la cadena, que dicen controla casi todos los aspectos de cómo funcionan sus restaurantes franquiciados.

Los trabajadores dijeron en una demanda federal presentada hoy, que unos 15 empleados negros de algunos restaurantes del sur de Virginia administrados por Soweva Co. fueron despedidos en mayo. La demanda agrega que el dueño de Soweva, Michael Simon, dijo a muchos de los empleados que aunque eran buenos trabajadores, "no se correspondían con el perfil" que él estaba tratando de crear para la compañía.

Los empleados dicen que cuando llamaron a las oficinas corporativas para quejarse sobre los despidos y una "discriminación flagrante", los funcionarios corporativos no hicieron nada.

Una declaración de McDonald's Corp. dijo que la compañía no había visto la demanda y que no podía comentar sobre las acusaciones, pero que la compañía y sus franquiciados "comparten un compromiso con el bienestar y el tratamiento justo de todas las personas que trabajan en los restaurantes de McDonald's".

Representantes de Soweva y Simon no respondieron de inmediato a llamadas de The Associated Press para comentar sobre el asunto.

Los demandantes dicen que los supervisores de los restaurantes denigraban frecuentemente a los trabajadores negros, usando términos como "gueto" para describirles, y quejándose de que había "demasiados negros en el restaurante". La demanda dice además que empleadas fueron tocadas inapropiadamente por un supervisor que además envió fotos lascivas e insinuó relaciones sexuales.

Los franquiciados operan la vasta mayoría de los más de 14.000 restaurantes de McDonald's en Estados Unidos y el caso refleja un creciente punto de contención para la cadena basada en Oak Brook, Illinois.

La demanda se produce un mes después que la Junta Nacional de Relaciones Laborales designó a McDonald's Corp. como "empleador conjunto" con sus franquiciados. La agencia, que resuelve las disputas empleado-gerencia en el sector privado, dice que la compañía y sus franquiciados son empleadores conjuntos porque la compañía ejerce una amplia influencia en cómo operan los franquiciados.

McDonald's ha dicho que apelará esa decisión.

El fallo se centra en salarios y condiciones laborales. La agencia federal dijo que encontró decenas de casos de conducta ilícita por la compañía, como sanciones a empleados que habían pedido mejoras laborales, incluso participando en protestas nacionales de trabajadores del sector de comidas rápidas.