Una tormenta tropical que adquirió rápidamente fuerza de huracán el lunes probablemente se intensificará antes de llegar al norte de Florida hacia mediados de la semana, informaron los meteorólogos. A las 8:00 de la tarde sus vientos habían aumentado a 85 millas por hora.

Michael podría convertirse en un gran huracán con vientos de hasta 120 mph para el martes por la noche antes de llegar a Florida, según el Centro Nacional de Huracanes. 

El lunes, el ojo del ciclón atravesó por el mar el costado occidental de Cuba y sus bandas de alimentación vertieron fuertes aguaceros sobre todo en la provincia de Pinar del Río y la Isla de la Juventud, mientras se preveían algunas inundaciones costeras en zonas bajas poco habitadas. 

“La situación no es alarmante, pero de un momento a otro puede comenzar a subir el cauce del río”, dijo a la televisión local Roselia Roque, presidenta del municipio de Isabel Rubio. Añadió que la población estaba atenta y se habían protegido el ganado y algunas infraestructuras. 

De los 24 embalses existentes en Pinar del Río, 13 comenzaron a verter antes del mediodía del lunes y la región occidental fue declarada por las autoridades en “Fase Informativa”, por lo que se activó un consejo de Defensa Civil que coordina las acciones y monitorea para evitar daños. No se reportaban afectaciones personales. 

Se pronostica que la tormenta avance hacia el Golfo de México, en donde las temperaturas cálidas y las condiciones atmosféricas favorables podrían aumentar su fuerza, escribió en un reporte Robbie Berg, especialista de huracanes en el centro basado en Miami. 

Ya que la tormenta pasará dos o tres días en el golfo, “hay una gran posibilidad de que Michael se fortalezca a un gran huracán antes de que toque tierra”, escribió Berg. 

El gobernador de Florida, Rick Scott, emitió un estado de emergencia para 26 condados a fin de que se puedan tomar medidas de precaución en el sector noroccidental del estado. Esto permitirá que se destinen recursos y la designación de 500 miembros de la Guardia Nacional de Florida para prepararse para Michael. 

"Esta tormenta podría ser letal y sumamente peligrosa", dijo Scott el domingo tras recibir un informe en el Centro de Operaciones de Emergencia. Advirtió que la marea alta podría afectar a zonas costeras del estado incluso si no están directamente debajo del meteoro.