Orlando - Un niño murió hoy y sus padres y hermano permanecen hospitalizados en el centro de Florida tras inhalar monóxido de carbono de un generador eléctrico que utilizaban debido a los apagones por el paso del huracán Matthew.

"Esto aparenta ser un trágico accidente", señalaron hoy las autoridades policiales de Daytona Beach, en el centro de Florida, que experimentó el impacto del huracán el viernes pasado.

Las autoridades precisaron que hallaron el generador apagado en una de las habitaciones de la vivienda, al que al parecer se le había "acabado la gasolina".

El menor fue identificado por la Policía como José Barrios, de nueve años.

Sus padres, Pedro Hernández y Matilda Barrios, se encuentran internados en el Centro Médico Halifax, de Daytona Beach, mientras que su hermano, Luis Hernández, fue trasladado al Hospital Infantil Arnold Palmer, en la ciudad de Orlando.

Su madre, Matilda Barrios, aunque incoherente, pudo ir a la casa de al lado a pedir ayuda a sus vecinos, que llamaron a la línea de emergencia 911, según el reporte oficial.

Tanto Hernández como Barrios se encuentran en condiciones críticas, dijo la policía. "Ella va a sobrevivir, pero no sabemos qué efectos duraderos tendrá". agregó.

Daytona Beach, ubicada en la costa este y una de las zonas más afectadas por Matthew, aún se encuentra bajo los efectos de este huracán y más de 23 mil residencias permanecen aún sin electricidad, por lo que las autoridades advierten sobre el peligro de utilizar generadores eléctricos dentro de las casas.

Cerca de 170,000 clientes (el 2 % del total) se encuentran aún sin energía en Florida, informó hoy el gobernador Rick Scott.

Las autoridades también informaron de la muerte de Marshall Bailey, de 89 años, quien se electrocutó tras tocar un cable del tendido eléctrico que los vientos de Matthew tumbaron en el patio de su vivienda, en León Springs, en el condado Volusia, también en el centro de Florida.

El huracán ha ocasionado en Estados Unidos más de una veintena de muertos en Florida, Georgia y las Carolinas, tras su paso por la costa sureste del país a partir del jueves pasado.

Entre los muertos en Florida, dos murieron por inhalar monóxido de carbono proveniente de un generador encendido y otros dos aplastados por la caída de árboles.