Chicago - Un grupo de trabajadoras de la cadena de comida rápida McDonald's dio a conocer hoy que han entablado una queja a nivel federal por ser víctimas de "hostigamiento sexual" de algunos supervisores de esta franquicia.

De acuerdo a un documento que contiene 15 quejas presentadas ante la Comisión de Igualdad de Oportunidad en el Trabajo, (EEOC, en inglés), y a la que tuvo acceso Efe hoy, cocineras y cajeras de esta cadena alegan que algunos supervisores las han tocado, les han hecho comentarios groseros y hasta les han hecho ofertas de dinero a cambio de sexo.

"Como el segundo empleador más grande del país, McDonald's tiene la responsabilidad de mantener estándares en la industria de la comida rápida como en la economía por igual", dijo Kendall Fells, director del movimiento "Fight for $15", que desarrolla una campaña a nivel nacional a favor de un incremento del salario mínimo.

Las mujeres, algunas ya ex empleadas, piden a la EEOC que la cadena McDonald's haga cumplir las reglas de su manual de operaciones, las cuales determinan "tolerancia cero" frente a casos de hostigamiento sexual en sus restaurantes.

En la queja presentada al organismo federal, las mujeres alegan que después de alertar a sus empleadores sobre el hostigamiento del que eran víctimas no se les hizo caso y hasta, en algunos casos, recibieron algunas recibieron represalias.

Kristi Maisenbach, una ex empleada de un local en Folsom, California, señaló que su supervisor en aquel entonces "le agarró sus senos en varias ocasiones e intencionalmente se rozó contra su trasero", además de proponerle en un mensaje de texto 1,000 dólares a cambio de tener sexo oral.

El supervisor se tornó hostil cuando Maisenbach se quejó con el gerente general y sus horas fueron reducidas, situación que la llevó a dejar su trabajo, según señaló.

"La lección era clara: te quejas y te enfrentas al castigo", dijo Maisenbach en una declaraciones que recoge un comunicado del movimiento.

Cycei Monae, empleada de un local de esta franquicia en Flint, Michigan, señaló también que su supervisor la hostigaba verbalmente y físicamente a diario, lo que incluía tocarle partes de su cuerpo.

Cuando presentó una queja contra su gerente de turno por ser víctima de hostigamiento y hasta recibir "una foto de sus genitales", la también ex empleada señaló que "McDonald's no tuvo respuesta alguna".

Una encuesta nacional hecha por la firma Hart Research Associates dio a conocer que el 42 % de las mujeres que trabajan en la industria de comida rápida son víctimas del hostigamiento sexual y se ven forzadas a aceptar el acoso por temor a perder sus trabajos.

La encuesta encontró que una de cada cinco mujeres señalaron que tras quejarse por ser víctimas de hostigamiento sus empleadores tomaron alguna acción negativa contra ellas, como recortar sus horas, cambiarlas a un horario menos deseable, darles tareas extras o negarles un aumento.

Terri Hickey, vocera en las oficinas centrales de McDonald's en Oak Brook, Illinois, dijo a Efe que la corporación se halla revisando todas las alegaciones, y destacó que en la corporación "no hay lugar para el hostigamiento y la discriminación de cualquier tipo".

"En McDonald's, nosotros y nuestros dueños y operadores independientes compartimos un hondo compromiso con el tratamiento respetuoso de todos", dijo Hickey.