BAKERSFIELD, California — Después de casi 61 años de matrimonio, muy poco podía separar a Don y Maxine Simpson, ni siquiera la muerte.

La pareja de California falleció en julio con sólo cuatro horas de diferencia y pasaron sus últimos momentos uno junto al otro. Él tenía 90 años y ella 87.

Melissa Sloan, nieta de la pareja, declaró al diario Bakersfield Californian (http://bit.ly/1pF82Ic ) que su abuela murió primero, y que cuando se llevaban su cuerpo, el alma de Don Simpson se fue con ella.

Se conocieron en un salón de bolos de Bakersfield, California, y se casaron en 1952. Don, que era ingeniero civil, en una época trabajó para el Ejército de Estados Unidos en Alemania.

La pareja adoptó unos mellizos en un orfanato en Alemania y regresaron a Bakersfield, donde ella trabajaba de enfermera y él tenía su propia compañía de ingeniería.

Los dos se mantenían activos en grupos cívicos locales. Les sobreviven un hijo y cinco nietos y nietas.