El primer ministro irlandés Enda Kenny no tuvo reparos para criticar al presidente Donald Trump, y además lo hizo frente a él.

Hablando durante una celebración en la Casa Blanca en honor a San Patricio, el patrón de Irlanda, Kenny descargó contra la visión antiimigrante de la administración Trump.

“Es algo adecuado que nos reunamos aquí cada año a celebrar a San Patricio y su legado. Él, por supuesto, también fue un inmigrante. Y aunque es el santo patrón de Irlanda, para mucha gente alrededor del mundo es también un símbolo, sin lugar a dudas un patrón de los inmigrantes. Aquí en los Estados Unidos, en este gran país, 35 millones de personas dicen ser descendientes de irlandeses, y los irlandeses han contribuido a la vida económica, social, política y cultural de esta gran nación durante los pasados 200 años. Irlanda vino a los Estados Unidos porque, habiendo sido privada de libertad, de oportunidad, de seguridad, y hasta de alimento, los irlandeses creyeron, y 40 años antes que la estatua de la Libertad encendiera su antorcha, éramos los pobres rechazados en la costa cada vez más llena de gente. Creímos en el albergue que ofrecía los Estados Unidos, en la compasión de los Estados Unidos, en las oportunidades de los Estados Unidos. Vinimos y nos convertimos en estadounidenses. Vivimos de acuerdo a las palabras de John F. Kennedy mucho antes de que las pronunciara. No preguntamos que podían hacer los Estados Unidos por nosotros, sino lo que podíamos hacer por los Estados Unidos, y que aún seguimos haciendo”, dijo el primer ministro irlandés.

Sus palabras tienen sin duda un mensaje directo para las políticas migratorias de Trump hacia grupos como los musulmanes o los latinos, contra los cuales se han diseñado políticas que van desde prohibiciones de entrada al país hasta la construcción de un muro en la frontera entre México y los Estados Unidos.