WASHINGTON. El Washington Post ha publicado una nueva columna de Jamal Khashoggi, en la cual el periodista saudí desaparecido advierte que a los gobiernos en el Medio Oriente “se les ha dado rienda suelta para seguir amordazando a la prensa en forma creciente”. 

El Post publicó la columna el miércoles, más de dos semanas después de que Khashoggi fue visto por última vez cuando entraba al consulado saudí en Estambul y apenas horas después que el diario turco Yeni Safak alegó que funcionarios saudíes le cortaron los dedos y lo decapitaron en el consulado mientras su prometida lo esperaba afuera. El gobierno saudí y el príncipe heredero Mohammed bin Salman han negado toda participación en el hecho. 

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En una nota que encabeza la columna, la editora de columnas de opinión global del Post, Karen Attiah, dijo que el traductor y ayudante de Khashoggi le entregó el escrito al día siguiente de la denuncia de su desaparición. Khashoggi empezó a escribir para la página de opinión del Post en septiembre de 2017. En sus columnas solía criticar al príncipe y el rumbo que tomaba el reino saudí. 

En la columna titulada “Jamal Khashoggi: lo que más necesita el mundo árabe es la libertad de expresión”, el periodista relató el encarcelamiento de un escritor conocido por hablar contra el establishment saudí y el caso de un diario confiscado por el gobierno egipcio. 

“Estas acciones ya no conllevan la consecuencia de una reacción de la comunidad internacional. En cambio, estas acciones provocan una condena seguida rápidamente por el silencio”, escribió. 

“Resultado de ello es que se ha dado a los gobiernos árabes rienda suelta para seguir amordazando la prensa en forma creciente”. 

En la columna, Khashoggi, un ciudadano saudí que se exilió en Estados Unidos ante el ascenso del príncipe heredero, también mencionó la costumbre de los gobiernos del medio oriente de bloquear el acceso al internet para controlar la información que reciben sus ciudadanos. 

“El mundo árabe enfrenta su propia versión de una Cortina de Hierro, impuesta no por actores externos sino por fuerzas internas que luchan por el poder”, escribió. 

En un principio, el Post se abstuvo de publicar la columna con la esperanza de que Khashoggi pudiera regresar, dijo Attiah, pero añadió: “Ahora debo aceptarlo, eso no sucederá”.