El centro norte y la costa este de Estados Unidos se preparan para otra onda gélida peor a lo usual y para una fuerte nevada después de varios días de temperaturas ligeramente arriba de lo normal para esta época del año.

El Servicio Meteorológico Nacional dijo que la gestación de una tormenta en medio del valle del Mississippi y la lluvia del martes en la noche causarán una nevada y el temporal avanzará para el jueves hacia el noreste, al golfo de Maine.

Según las previsiones, la tormenta dejará ocho pulgadas de nieve en el área de Chicago y el norte de Indiana, y una cantidad mayor por los Grandes Lagos en Ohio, Pennsylvania, y el norte de Nueva York antes de que se disipe en Canadá.

Este invierno han caído en Chicago 75.5 pulgadas de nieve, el cuarto volumen más grande desde la temporada 1885-1885, según los registros.

Con la nieve que se prevé para el miércoles, el total pasará al tercer lugar y rebasará las 77 pulgadas de la temporada 1969-1970.

El sureste de Michigan, donde se prevé la caída de nueve pulgadas, podría romper la marca histórica que ha durado 133 años.

La tormenta posiblemente hará que el volumen de nieve en la temporada en la zona de Detroit se acerque al total de 93.6 pulgadas de 1880-1881, según el servicio meteorológico.

De acuerdo a los pronósticos, la temperatura descenderá unos 40 grados Fahrenheit en un periodo de 24 horas entre el martes y miércoles, dijo Chad Swain, meteorólogo en el Servicio Climatológico Nacional.

"Estamos a 68 F ahora", dijo Swain el martes en la tarde. "Ese tiempo va a cambiar rápidamente", agregó.

En Missouri, las altas temperaturas alcanzaron el martes 70 F en gran parte del estado.

Serán sustituidas con condiciones de viento y temperaturas abajo de los 30 F para el miércoles en la mañana, pero después volverán a subir el jueves a los 50 F, según los expertos.

Han causado cierta confusión los cambios de temperatura, como en Chicago, donde descendieron casi a menos 15 F para el miércoles en la tarde después de haber subido a 50 F el martes.

"Ayer vino una persona y pidió sal, después llegó otra que pidió composta. Esto sólo pasa en Chicago", dijo Richard Schauer, dueño de la ferretería Schauer's Hardware en Forest Park.

Schauer dijo que su tienda, igual que muchas otras, ya no tiene sal. Dijo que no tiene previsto conseguir más solo para otra tormenta de nieve.