WASHINGTON - El vicepresidente Mike Pence rompió un empate a 50 al emitir su voto este martes para que el Senado comience a debatir una medida republicana con el fin de revocar gran parte de la ley de cuidado a la salud promulgada por el expresidente Barack Obama. 

Lo ocurrido representa una victoria crucial preliminar para el presidente Donald Trump y los líderes republicanos, aunque el desenlace de los debates de una semana de duración sigue siendo incierto. 

La votación de 51-50 mantuvo con vida las esperanzas de cumplir las promesas que un sinnúmero de candidatos republicanos han prometido en sus campañas durante años: revocar la reforma de salud que Obama promulgó en el 2010. 

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También evitó lo que pudo haber sido una dolorosa derrota para un partido dividido entre fervorosos conservadores que exigen la revocación de la ley de salud y centristas que no quieren dejar sin cobertura médica a millones de estadounidenses. 

Pence presidió la reunión de la cámara alta durante la votación, que comenzó después de que varias decenas de manifestantes gritaron "¡Eliminen la propuesta!" y "¡Vergüenza!" desde la sección de visitantes del recinto. 

Y en otro momento destacado de la jornada, el senador John McCain, republicano por Arizona, emitió otro voto crucial en favor del debate tras volar al Capitolio apenas días después de que le diagnosticaran cáncer en el cerebro y se quedara en casa sopesando sus opciones de tratamiento. 

El voto del senador de 80 años permitió que el líder de la bancada mayoritaria del Senado Mitch McConnell, republicano por Kentucky, pudiera perder los sufragios de dos senadores de su partido y aun así ganar, un margen de maniobra que se hubiera reducido a sólo uno si McCain no se hubiera presentado. 

Los republicanos tienen 52 miembros en el Senado, en comparación con 48 demócratas. 

McCain ingresó a la cámara alta 29 minutos antes de la votación y fue ovacionado por sus colegas de ambos partidos y los visitantes que observaban desde arriba. Sonriente, abrazó a McConnell, al líder de la bancada minoritaria del Senado Chuck Schumer, demócrata por Nueva York, y a otros colegas. 

Luego votó en favor de la iniciativa e hizo una señal de aprobación con los pulgares. 

Antes de votar, McConnell dijo: "No podemos dejar que este momento se nos vaya de las manos”. 

Las moderadas Susan Collins, que representa a Maine, y Lisa Murkowski, que representa a Alaska, fueron las únicas senadoras que no sufragaron en línea con su partido. Ningún demócrata votó en favor de la medida. 

Técnicamente, la votación del martes significa que el Senado sopesaría una medida que la cámara baja aprobó en mayo, que pide eliminar gran parte de la ley de salud de Obama. 

Al igual que la propuesta que McConnell escribió a puertas cerradas, que desde entonces han sido enmendadas, eliminaría las multas establecidas bajo la ley actual que afectan negativamente a personas que no adquieren pólizas, recortaría fondos para el programa gubernamental Medicaid de atención a los pobres, eliminaría muchos de los incentivos fiscales establecidos por la ley y ofrecería subsidios de salud menos generosos a los consumidores.