NUEVA YORK. Cuando faltan apenas unos días para que preste juramento como presidente de Estados Unidos, Donald Trump continuó atacando a sus críticos en los servicios de inteligencia y los congresistas demócratas que han amenazado con abstenerse de asistir a la ceremonia de investidura.

En un tuit la noche del domingo, el presidente electo republicano planteó que el propio director de la CIA pudo haber sido quien filtró noticias falsas.

Las críticas inéditas del próximo mandatario fueron hechas horas después de que el propio director de la CIA, John Brennan, acusara a Trump de no entender del todo la amenaza que Moscú representa para Estados Unidos. El intercambio subrayó aún más el mal estado de las relaciones de Trump con las agencias de inteligencia estadounidenses.

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Brennan ofreció el domingo un mensaje incisivo por televisión nacional apenas cinco días antes de que Trump se convierta en el 45to presidente de la nación, en medio de persistentes cuestionamientos sobre el papel de Rusia en las elecciones de 2016 pese a que la atención se centra en los desafíos de gobernar.

"Ahora que él va a tener la oportunidad de hacer algo por nuestra seguridad nacional, y no solo hablar y tuitear, tendrá la tremenda responsabilidad de asegurarse de que los intereses de Estados Unidos y de la seguridad de la nación estén protegidos", afirmó en el programa "Fox News Sunday". Brennan advirtió que la impulsividad del presidente electo podría ser peligrosa.

"La espontaneidad no es algo que proteja los intereses de la seguridad nacional", enfatizó Brennan.

Trump, que en semanas recientes ha dado rienda suelta a una serie de agresivos tuits contra la comunidad de Inteligencia de Estados Unidos y contra sus adversarios políticos, no respondió inmediatamente a las críticas de Brennan, pero más tarde el domingo, tuiteó: "Oh, en verdad no pudo hacer las cosas mucho peor. Solo vean (la línea roja en) Siria, Crimea, Ucrania y la acumulación de armas nucleares rusas ¡Nada bueno! ¿Fue él quien filtró noticias falsas?".

Previamente en la noche del domingo, Trump retuiteó la declaración de un periodista de que la comunidad de Inteligencia le debe una disculpa a Trump por informarle sobre un documento que contiene información personal y financiera no verificada que podría dañar al presidente electo.

"Los medios de comunicación también deberían disculparse" por reportar sobre el documento y la sesión informativa, escribió Trump. The Associated Press no ha podido verificar los contenidos del documento.

El presidente electo se encerró el domingo en su rascacielos de Manhattan. Su equipo trabajaba para responder preguntas sobre sus planes a nivel nacional e internacional una vez que juramente al cargo el viernes.

Entre los retos inmediatos de Trump se encuentran una complicada relación de Estados Unidos con Rusia, la creación de una alternativa accesible de atención a la salud que no deje sin cobertura a millones de estadounidenses, y los crecientes cuestionamientos respecto a la legitimidad de su presidencia.

Una voz importante reclama su falta de legitimidad

El legislador John Lewis, legendario defensor de los derechos civiles, es uno de varios congresistas demócratas que juraron no asistir a la toma de poder de Trump, y quienes acusan que la interferencia rusa en la elección de 2016 revoca la legitimidad de su presidencia.

"Habrá muchos más miembros que se unirán a nosotros en esta decisión", escribió el sábado el legislador demócrata Jared Huffman, de California, en su página de Facebook.

Trump ha restado importancia repetidamente a información de inteligencia, que ha convencido a republicanos y demócratas de que Rusia trató de ayudarlo a ganar la elección.

El presidente electo también ha insinuado que la comunidad de inteligencia lo tiene en la mira, basando su crítica en incidentes como la filtración de un documento no verificado que tenía información personal y financiera potencialmente dañina para él. Trump ha comparado la situación con la "Alemania nazi".

El domingo, Brennan calificó esta comparación de "indignante" y agregó que la comunidad de inteligencia quería que el presidente electo supiera que el documento estaba circulando entre algunos medios noticiosos.

Una serie de revelaciones han arrojado más luz sobre la relación entre Trump y Putin.

El general retirado Michael Flynn, que se convertirá en el asesor de seguridad nacional de Trump, y el embajador de Rusia en Estados Unidos han estado en contacto frecuente en las últimas semanas, incluso el día en el que el gobierno de Barack Obama sancionó a Moscú en represalia por el presunto hackeo electoral, dijo un alto funcionario estadounidense.

Después de negar inicialmente que Flynn y el embajador Sergey Kislyak hayan dialogado el 29 de diciembre, un funcionario de Trump admitió el viernes que el equipo de transición estaba al tanto de una llamada el día en que el gobierno de Obama impuso las sanciones.

El vicepresidente electo Mike Pence, también en declaraciones al programa "Fox News Sunday", negó que Flynn y Kislyak hayan analizado algo relacionado con las sanciones.

Repetidamente, Trump ha exhortado a una mejor relación entre Estados Unidos y el gobierno del presidente Vladimir Putin. Durante una entrevista con el Wall Street Journal el viernes, Trump insinuó que sopesaría disminuir las sanciones que el presidente Barack Obama aplicó a Rusia como retribución por el presunto hackeo electoral.

"Creo que él debe tener en cuenta que no tiene una apreciación y comprensión completa de las implicaciones de ir por ese camino", declaró Brennan.