La ex policía Griselde Camacho, de 48 años, figura entre una de las personas fallecidas como consecuencia de la explosión de dos edificios ocurrida ayer, miércoles, en Nueva York.

De acuerdo con información reseñada en el portal del New York Post, Camacho, quien posterior a su retiro se dedicaba a ser guardia de seguridad en Hunter College, solía tener un buen récord de asistencia laboral, cualidad que la llevó a ganar en 2010 un premio por tal mérito.

Sin embargo, durante esta semana Camacho optó por permanecer en su residencia ya que estaba confrontando síntomas de asma. Irónicamente, esta precaución la llevó a figurar entre las víctimas fatales de la tragedia, que ha cobrado al menos seis vidas, más de 60 heridos y cinco desaparecidos.

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“Todo el mundo está sorprendido", expresó un empleado del campus universitario tras conocer la noticia.

Según Prensa Asociada, Camacho trabajaba como oficial de seguridad en el edificio de Trabajo Social de la Escuela Silberman. Hunter, en un comunicado publicado en su sitio de internet, indicó que Camacho había trabajado con la institución desde 2008.

La mujer, quien según el New York Post perteneció al cuerpo de la Policía de Puerto Rico, era madre soltera de un menor de 15 años.

El estallido ocurrió cerca de las 9:30 de la mañana de ayer, unos 15 minutos después de que un residente reportara un olor a gas, dijeron las autoridades, según información difundida por Prensa Asociada. La empresa ConEd dijo que envió de inmediato un equipo de trabajadores a revisar el reporte, pero cuando llegaron era demasiado tarde.

La explosión destrozó los escaparates de una cuadra a la redonda, arrojó escombros en las vías del tren suburbano, envió densas columnas de humo al cielo y sacó a la gente corriendo a las calles.

Los dos edificios de cinco pisos en la avenida Park y la calle 116, no muy lejos de la esquina nororiental del Central Park, quedaron reducidos a un amasijo de ladrillos, madera y metal en llamas.