Como dicen por ahí, los amigos son la familia que escogemos. Y eso lo explica todo.

Un grupo de investigadores sugirió el lunes a través de un estudio publicado en Proceedings of the National Academy of Science of the United States of America que probablemente  exista un vínculo genético entre las personas que componen un círculo de amistades, según publicó el portal web El Tiempo.

Según el coautor del estudio y profesor de genética médica y ciencias políticas en la Universidad de California, James Fowler, los amigos comparten más ADN en común que las personas que consideran extrañas en la población. 

Así fue como Fowler junto a Nicholas Christakis, coautor del estudio y profesor de sociología y biología evolutiva, utilizaron la base de datos de Framingham Heart Study para realizar el  primer análisis de todo el genoma correlacionar de genotipos entre amigos.

Los investigadores hallaron que los amigos comparten alrededor de un 1% de genes similares, asimismo, el estudio indicó que la genética que se comparte con los amigos es similar a la que se comparte con los primos de la cuarta generación.

Por otra parte, también se halló que las personas que escogemos para relacionarnos tienden a ser inmunológicamente diferentes, lo que ofrece una protección extra al sistema inmunológico.