Georgia, EE.UU.-  Un hombre que hirió de bala a seis compañeros de trabajo en la zona de Atlanta no parecía muy entusiasmado con su empleo de cargar cajas, pero nunca mencionó ningún problema a sus compañeros o supervisores, dijo su padre hoy. 

Geddy Kramer llegó ayer por la mañana con una escopeta al centro de selección de paquetes de FedEx donde trabajaba. Le disparó al guardia de seguridad y entonces al área general donde trabajaba el grupo en un almacén grande, antes de suicidarse, dijeron las autoridades.

"Para él era solo un empleo. No se mostraba muy entusiasmado, era solo un trabajo", dijo Scott Kramer, quien vivía con su hijo. "No tenía ninguna queja, que yo supiera. No dijo que tuviera problemas con algún compañero de trabajo o supervisor, nada de eso", dijo el padre.

Autoridades policiales han conocido que varios compañeros de trabajo reportaron a Kramer a la gerencia por apuntar un escáner de láser a los ojos de colegas de trabajo, dijo Vic Reynolds, fiscal de distrito del Condado Cobb, quien agregó que no sabía eso fue un factor en el ataque.

Michael Bowman, portavoz de la Policía del Condado Cobb, dijo que los investigadores encontraron una nota dejada por Geddy Kramer, pero no sabía lo que decía. Bowman agregó que Kramer compró la escopeta y que los investigadores encontraron la caja, pero declinaron decir dónde la adquirió.

El padre de Kramer pidió disculpas por las acciones de su hijo y pidió a la gente que se concentre en las víctimas. El padre y otros familiares del agresor batallan por reconciliar a un joven tímido a quien le gustaba acampar y pescar con el autor del ataque.

"Siento que he perdido a mi hijo de dos formas", dijo Scott Kramer a los reporteros frente a su casa. "La persona que hizo esto en FedEx, no la conozco Mi hijo era alguien completamente diferente".

Tres de las seis personas llevadas el martes al hospital han sido dadas de alta. Uno de los que sufrió las peores lesiones, el guardia de seguridad Chris Sparkman, ha sido operado dos veces de las heridas sufridas cuando Kramer le disparó en el abdomen. Hoy estaba en estado crítico pero estable. Casado hace menos de un año, Sparkman estaba trabajado horas extra.

Le faltaban tres minutos para acabar su turno cuando Geddy Kramer le disparó.

"Este hombre hacía cualquier cosa por ayudar a los demás", dijo Richard Hemphill, el pastor de la iglesia de Sparkman.