Washington.- Un comité del Congreso debe aprobar mañana una nueva asignación de $1,000 millones en fondos de Medicaid para Puerto Rico, que podrán ser utilizados desde ahora hasta el 31 de diciembre de 2019.

Los fondos, que ayudarían a mitigar hasta principios de 2019 el abismo fiscal en el sistema de salud de Puerto Rico, serían integrados al proyecto de ley que reautorizaría por cinco años el plan de salud infantil (CHIP).

La portavoz del subcomité de Salud de la Comisión de Energía y Comercio de la Cámara baja. Jennifer Sherman, anunció anoche que la propuesta irá a votación mañana en el pleno de la comisión.

La comisionada residente en Washington, Jenniffer González, por su parte, pronosticó que la medida será aprobada en comisión y se llevará a votación la semana próxima en el pleno de la Cámara baja federal.

La medida ayudaría a mitigar hasta principios de 2019 el hueco que deja en el sistema de salud federal el agotamiento la primavera próxima de los cerca de $1,200 millones anuales en fondos de Medicaid que ha otorgado la ley Obamacare.

Junto a la industria de la salud, autoridades del gobierno de Puerto Rico han cabildeado por nuevas asignaciones de Medicaid ante el hueco que deja el fin de los fondos de Obamacare.

La legislación sería una de las primeras iniciativas del Congreso para reaccionar a la catástrofe que ha causado en Puerto Rico el huracán María.

“Las evaluaciones preliminares de la Agencia federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) indican que la recuperación de Puerto Rico va a ser un proceso largo y arduo”, indicó la comisionada González, en una carta que le envió ayer al presidente del Comité de Energía y Comercio, Greg Walden, y al portavoz de la minoría demócrata, Frank Pallone.

El hecho de que la medida esté ya incorporada a las propuestas del liderato de la comisión deben asegurar su aprobación.

El cabildero y ex congresista republicano Jerry Weller, quien representa a la Asociación de Hospitales, dijo que aunque la asignación es de corta duración – lo que obliga las autoridades a renovar su cabildeo-, es importante que se legisle como un aumento en el tope de las asignaciones de Medicaid.

Por ley permanente, Puerto Rico recibe unos $322 millones anuales en fondos de Medicaid. Pero, la ley Obamacare le ha permitido a Puerto Rico recibir hasta otros $1,200 millones anuales adicionales. Esos fondos, que totalizaban unos $6,400 millones, pueden agotarse en los próximos meses.

Weller reconoció que la comisionada González ha presionado con fuerza dentro de la conferencia legislativa a favor de estos fondos.

En la primavera, el Congreso - por encima de la oposición del presidente Donald Trump- aprobó otra asignación de $296 millones en fondos de Medicaid.

Según la comisionada González, de los $1,000 millones, la Junta de Supervisión Fiscal a cargo de la finanzas públicas de Puerto Rico tiene la llave para otorgar $120 millones.

Para que los $120 millones estén disponible, la junta federal tiene que certificarle al Congreso que el gobierno de Puerto Rico ha cumplido con ciertas medidas de control financiero, indicó la comisionada.

De aprobarse la legislación, todo indica que el abismo fiscal en los fondos de Medicaid se aplazaría hasta principios de 2019.

“Antes de los huracanes, Puerto Rico se estaba enfrentado a un precipicio fiscal empezando en mazo de 2018. Después de los huracanes Irma y María, los gastos del sistema de salud de Purto Rico se han disparado exacerbando el abismo (fiscal)”, sostuvo la comisionada, en la carta en que le imploró a los líderes del Comité de Energía y Comercio atender el asunto en el proyecto de ley sobre CHIP, como había sugerido antes el speaker Paul Ryan.

Los demócratas han estado presionando a favor de que cualquier asistencia de emergencia incluya resolver el abismo fiscal en los fondos de Medicaid.

En el Senado, el Comité de Finanzas del Senado tiene programado llevar a votación el miércoles su propia versión sobre la reautorización por cinco años del CHIP.

La legislación original del Senado no incluye fondos adicionales de Medicaid para Puerto Rico, sino los fondos tradicionales de CHIP que también se destinan al plan Mi Salud del gobierno puertorriqueño. Pero, varias fuentes legislativas han confiado que el agravamiento de la crisis en Puerto Rico, facilite encaminar la medida, aunque no tenga la vigencia de cinco años que tiene el programa CHIP.